Con gusto a lanzamiento de campaña, Yasna Provoste fustiga al gobierno en la cuenta pública de su gestión

Prácticamente inadvertidas pasaron las cifras del trabajo realizado por la Cámara de Diputados y el Senado, en la séptima Cuenta Pública de los presidentes de ambas corporaciones, Diego Paulsen (RN) y Yasna Provoste (DC), respectivamente, cuyos discursos fueron eminentemente políticos y estuvieron marcados por la contingencia, centrados en los efectos de la pandemia, la labor del Ejecutivo en esta materia, y la Convención Constitucional. Pero también fue percibido como al antesala del lanzamiento de la campaña presidencial de la senadora falangista.

Por lo que tras esta actividad, comienzan los descuentos para la proclamación de la senadora Yasna Provoste con al abanderada presidencial de la Democracia Cristiana. Fuentes del partido aseguran que el acto de lanzamiento de la candidatura se realizará en la ciudad de Vallenar al medio día de este viernes, no sólo porque es donde vive la presidenta del Senado, sino para dar una señal en materia de descentralización, se comenta en la colectividad.

Cuenta pública

Mientras el presidente Sebastián Piñera seguía atento, desde la testera del Salón Plenario de la sede del Congreso en Valparaíso, la titular del Senado hizo duras críticas a su gestión. Jornada que además estuvo marcada por la incertidumbre respecto del anunció que realizará mañana Provoste, donde se espera que anuncie su candidatura presidencial, con lo que se especula estaría dejando la presidencia de la Cámara Alta.

En su discurso, la senadora le reprochó, entre otras cosas, al gobierno su manejo de la crisis económica producto de la pandemia, que impulsó al Congreso a aprobar los tres retiros de fondos desde las AFP, necesarios para paliar la situación económica que atravesaban los chilenos, debido a que las medidas de las autoridades resultaban insuficientes.

"Desde luego, tramitamos tres retiros de fondos de las AFP aprobados por un amplio arco político, tras las dificultades encontradas en el diálogo con el Ejecutivo y las insuficientes medidas adoptadas para enfrentar la pandemia", sentenció la presidenta del Senado.

En esta misma línea, enrostró al gobierno las dificultades que atravesó el Senado para avanzar en el proyecto de post natal de emergencia y en los proyectos para la postergación del pago de servicios básicos y su posterior prórroga, propuestas indispensables para las personas, pero que pese a ello, tuvieron que sortear incluso las barreras impuestas por el gobierno que recurrió al Tribunal Constitucional", señaló.

Pero Provoste no sólo se ciñó a los temas relativos a la cuenta, en el ámbito político la senadora asestó un duro golpe al gobierno, al señalar que "más que entender la realidad, el buen gobierno tiene que administrar y gestionar iniciativas para resolver los problemas de la gente. Sin embargo, le ha costado entender la gravedad de los problemas que viene sufriendo la población".

A lo que añadió que el talante mostrado por la actual administración frente a la crisis se puede definir con tres conceptos: "serían ahorro, híper-focalización y desconfianza en las personas".

Pero eso no fue todo. Las críticas al Ejecutivo fueron el hilo conductor del desarrollo de su discurso, mientras el mandatario recibía estoicamente los embates de la senadora que arengaba a sus seguidores, remarcando que "no ayuda a salir del estancamiento un sistema político concentrado en las elites, incapaz de procesar y de satisfacer demandas y, en consecuencia, con una baja adhesión de la población", a la vez que destacaba su ascendencia diaguita.

Tras lo cual añadió que los principales actores políticos e institucionales del oficialismo "han perdido ascendiente y capacidad de iniciativa. Esto revela el agotamiento de la voluntad política. Y esta fatiga institucional sólo contribuye a la parálisis de la acción urgente del Estado en beneficio de las personas".

Provoste también destacó el trabajo de la Convención Constitucional y en especial la labor de la presidenta de la instancia Elisa Loncon, por su calidad de mujer y representante de los pueblos originarios.

Por último, llamó a "hacer las cosas bien" y a enfrentar los desafíos que Chile tiene como país para "construir un país más próspero, más justo y más respetuoso de la dignidad de su gente". Para cerrar, asegurando que "confiamos en Chile y su gente, confiamos en nuestro pueblo, en su mandato y en nuestras fortalezas".

Llamado a los acuerdos

Poe su parte, el presidente de la Cámara, Diego Paulsen (RN), cuyo discurso también tuvo el foco en lo político, aseguró que la situación generada por la pandemia "no ha sido fácil, el Estado de Chile ha realizado su mayor esfuerzo", haciendo un reconocimiento a lo realizado por el gobierno.

A propósito de la Convención Constitucional, hizo hincapié en que la Cámara puso al servicio del organismo su infraestructura y al personal necesario para su buen funcionamiento.

Pero también recalcó que "el ánimo colaborativo inicial se fue disipando rápidamente. La violencia, la funa y la intolerancia son hoy componentes de un ambiente político cada vez más crispado. La "paz", que era parte fundamental de la ecuación del acuerdo, que precisamente se llamaba Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, no se ha alcanzado", advirtió.

En este ámbito, Paulsen destacó que "el rol que tiene la Convención Constitucional es muy distinto al que tiene el Congreso Nacional, tanto el actual como el que se conformará en los comicios de noviembre de este año. Lo que corresponde es el respeto recíproco en lo que refiere al mandato y atribuciones de cada institución", instó.

Y advirtió que en el proceso deliberativo del organismo encargado de redactar la nueva Constitución las formas son casi tan importantes como el fondo y que debe estar basado en "una aproximación racional y fundada en cada uno de los aspectos del debate".

Paulsen –quien representa a la Región de La Araucanía en el Congreso-, manifestó su preocupación debido a que en algunas partes del país, "lo que vemos es una pérdida de control territorial. Tenemos un problema de estatalidad básico: el Estado de Derecho tambalea", como en La Araucanía y en la llamada zona cero, en Santiago.

Por lo que abogó para que se retome el Plan Araucanía y que se le entreguen más herramientas a Carabineros para enfrentar los hechos de violencia que subsisten en la zona.

Y concluyó señalando que "tenemos un desafío enorme en nuestras manos, las decisiones que tomemos forjarán el camino que enfrentará nuestra nación por los próximos cuarenta años. Debemos lograr fortalecer nuestra democracia, lograr que la Constitución realmente sea la casa de todos, que sea la voluntad de vivir juntos, los distintos. Por ende, tenemos la obligación moral y política de hacerlo bien y con acuerdos".