Para enero de 2020 quedaron las ofertas que la Superintendencia de Casinos y Juego (SCJ) espera recibir para otorgar o renovar 12 permisos de salas a lo largo del país, en un proceso que había tenido su etapa inicial a comienzos de marzo, cuando se consultaron bases preliminares del proceso.
La autoridad lanzó este lunes oficialmente el concurso, el que ha motivado una fuerte ofensiva desde la industria, dado que a juicio de los actuales operadores no se estaría reconociendo el derecho preferente para renovar los permisos por otros 15 años más.
Según han argumentado, en 2005 se motivaron inversiones que iban más allá de instaurar una sala de juego, con el argumento que habría un derecho preferente para que pudieran renovar sus permisos, lo que les permitiría recuperar la inversión.
La SCJ publicó las bases del proceso y abrió un proceso de consultas y aclaraciones del texto por días días, quedando la recepción de ofertas para el lunes 18 de enero a las 10 horas en el Hotel Gran Palace del centro de Santiago.
Dentro de los 120 días hábiles siguientes a que lleguen las ofertas, la SCJ realizará la evaluación de las ofertas técnicas. Dependiendo si el postulante es un nuevo oferente o desea renovar la concesión será el puntaje bajo el cual se evaluará.
Para ambos casos hay una escala común, la que contempla un total de 1.000 puntos, donde 400 se dividen en partes iguales por informes de la Intendencia, la Municipalidad, el Sernatur y el Ministerio del Interior en base a la evaluación de distintos aspectos, como la ubicación o la factibilidad técnica de llevar el proceso. Otros 600 puntos se darán en base a las cualidades del proyecto y su plan de operación.
En el caso de que se busque renovar, habrá un tema adicional a evaluar, que corresponde al “desempeño o ejercicio operacional del casino de juego de la sociedad operadora”, lo que otorga otros 100 puntos.
Quienes superen el 60% del puntaje total -base 1.000 para nuevos oferentes y base 1.100 para quienes renueven- pasarán a competir sobre oferta económica, donde dependiendo a la zona donde postule -dado que hay zonas que tienen reservados permisos-, básicamente ganará el que haga la oferta más alta, que en este caso corresponde a un valor que será pagado anualmente a la municipalidad correspondiente a la comuna en que se encuentre ubicado el casino.
Dado que el concurso establece inversiones mínimas dependiendo la zona a la que se postule, la SCJ mantuvo su idea de que los actores que ya tienen presencia, puedan justificar el 80% de lo ya invertido para este nuevo proceso.
Proceso de diálogo
En paralelo a que se daba el vamos a la licitación, la Subsecretaría de Hacienda, que preside además el Consejo Resolutivo, órgano colegiado de la SCJ, emitió una declaración señalando -además del inicio de la subasta-, de que iniciará un proceso de diálogo con diversos actores involucrados del rubro para debatir las distintas interpretaciones que hay sobre la legislación -y el derecho preferente que tendrían los actuales concesionarios- y los efectos sanitarios, laborales y económicos que ha producido la pandemia.
Aunque no entregó fecha, dijo que esto partiría en los próximos días.
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