Portugal logró colocar con éxito emisión de deuda soberana clave

El primer ministro de Portugal, José Sócrates, advirtió el martes que su país no solicitará ayuda financiera por la simple razón de que no es necesario. Y la autoridad lusa aparentemente consiguió convencer a los mercados porque ayer recaudó 1.249 millones de euros (US$ 1.620 millones) con la venta de dos bonos.

La operación se consideraba una prueba de fuego sobre la capacidad de la pequeña economía europea de mantenerse a flote sin recurrir a un rescate del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea. Y la superó con éxito, porque la demanda por los títulos superó en 3,2 veces a la oferta y las tasas de interés que tiene que pagar el gobierno cayó.

El bonos a diez años por US$ 599 millones registró un rendimiento de 6,71%, inferior a la tasa de 6,81% que tuvo que pagar en la colocación anterior de noviembre y apenas 2,8 puntos porcentuales por sobre el bono soberano a diez años en dólares que emitió en agosto el gobierno chileno, considerado uno de los mejores pagadores del mundo por su bajo nivel de deuda, y que recaudó US$ 1.000 millones.

El resultado de la operación trajo alivio a los mercados e impulsó alzas en las principales bolsas del mundo.



Rumores de un rescate

Aunque la Unión Europea ha negado en los últimos días los rumores que circularon el fin de semana sobre las presiones de las autoridades europeas para que Lisboa acepte un rescate, el paquete que están diseñando los gobiernos europeos para hacer frente a la crisis incluiría un préstamo por 60 mil millones de euros (US$ 78 mil millones) para Portugal, dijeron a Bloomberg dos fuentes cercanas a las negociaciones que pidieron reserva de su identidad. El plan incluiría además un programa de recompra de deuda, rebajas a las tasas de interés para los créditos de emergencia y garantías contra el exceso de endeudamiento.

Las declaraciones siguen siendo confusas. Ayer el vice ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Werner Hoyer, dijo que Portugal no debería ser forzado a aceptar un rescate, mientras la canciller germana, Angela Merkel, dijo que su país está dispuesto a hacer lo que sea necesario para salvar al euro.

Pero las economías europeas tendrán que sortear otra valla hoy, cuando España subastará hasta 3.000 millones de euros de bonos a cinco años e Italia colocará otros 6.000 millones de euros con maduración a 2026 y 2015. Estos países podrían replicar el éxito de Portugal pero si fracasan el nerviosismo volverá a los mercados.