Cartas
Cartas al Director
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Dos años en la OECD
Señor Director:
Desde hace poco, la OECD ha establecido la medición del desempeño económico y el progreso social, que trata de aumentar la cantidad y calidad de indicadores económicos y sociales para establecer un real seguimiento del mejoramiento de las condiciones de las personas. En chileno, no seguir solo el aumento del PIB sino tener evidencias sobre qué otros efectos tiene ese crecimiento, por ejemplo.
Si bien la OECD ha logrado mejorar gran parte de estos indicadores para su población, en Chile debemos ser críticos en seguir y mejorar los indicadores, leyes, procedimientos y otras medidas OECD que realmente nos sirvan, ya que algunas de estas variables han llevado a varios países europeos a su actual crisis, basada en una “succión” hacia el socialismo y centralismo que ejerció por muchos años la extinguida Unión Soviética; Europa, en todos estos años post caída del muro de Berlín, no supo distinguir ni desarticular las variables e indicadores de demasiado bienestar y que no podían financiar permanentemente, sin olvidar el efecto de la crisis subprime.
En Chile, hay varios aspectos básicos que debemos desarrollar y que nos llevarán a mejorar en todo sentido sin caer en un excesivo bienestar, como: la descentralización del país, la regulación o desregulación de barreras de entrada y/o salida de varios sectores económico-financieros que muestran evidentes signos de una excesiva concentración, la preocupación y mejoramiento por los trabajos, productos y servicios para la tercera edad que tendrá un aumento explosivo en el corto plazo, el cambio cultural sobre la educación, la salud y el trabajo, de los deberes y los derechos, y el cambio en las instituciones políticas y en su conducción yendo a una real vocación de servicio público, entre otras.
Podemos partir por estos aspectos básicos para que en las próximas elecciones de cualquier tipo discutamos sobre ideas, proyectos, plazos, metas, recursos y mejoramiento de las ciudades, comunas , regiones y del país, y no de quienes y de qué componenda política van a salir los electos y prepararse para las próximas elecciones.
Jorge Porter Taschkewitz
27F
Señor Director:
Días después del terremoto expresé en una carta enviada a su dirección la profunda necesidad de encontrar la unidad para superar como país una de las pruebas más exigentes que hemos tenido. Me referí a la culpa como aquello que busca la gente para encontrar responsables de una tragedia, que desde mi punto de vista no tenía responsables penales. Dos años después, creo que es el momento de revisar el actuar de nuestras autoridades.
Creo no equivocarme al pensar que las personas llamadas a tomar decisiones no estaban empoderadas, posiblemente tampoco capacitadas y sobre todo presionadas, producto del miedo, desinformación, confusión y falta de liderazgo. Es un problema organizacional, no político. Cuando la máxima autoridad política asume operativamente la gestión de una emergencia también asume el riesgo que ello conlleva, puede que sea lo que la gente quiere ver, que eso sí es un tema político. Este riesgo es el que muy entusiastamente el actual presidente asumió en los primeros meses de su gobierno, estar ahí, estar en todas, lo que le valió críticas fundadas y un problema para la institucionalidad del país.
“Las instituciones deben funcionar”, no deja de ser la mejor frase que legó el presidente Lagos, son ellas las responsables en base a la experiencia y conocimientos específicos de las personas que las integran quienes deben asumir las responsabilidades de su función. Si alguien con mayor autoridad quiere tomar esa función, debe responsabilizarse de sus actos y de lo que significa para la institucionalidad del país.
CRISTIÁN PALACIOS Y.
Accidentes
Señor Director:
En las últimas semanas se ha detectado un aumento de los accidentes automovilísticos ocurridos en las carreteras del norte de nuestro país. Por ello siempre es recomendable manejar a una velocidad adecuada, mantener una distancia prudente y revisar las condiciones mecánicas del vehículo antes de cada viaje.
EDUARDO OLIVARES
SubDirector Escuela de Ingeniería AIEP