Señora Directora:
Lo bueno, la plata efectivamente era de los ahorrantes y no de las AFP como muchos manifestaron. Lo malo, la incapacidad de nuestros políticos, especialmente parlamentarios, para llegar a acuerdos. Lo feo, las futuras pensiones de los chilenos y su falta de educación financiera.
Carlos Pérez-Cotapos Ugarte