Columnistas

Ajustes legales a la reforma tributaria: hora de pensar en un sistema de “Flat Tax”

Juan Carlos Martínez Presidente de Asimet

  • T+
  • T-

Compartir

El anuncio del ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, respecto del envío de un proyecto de ley para realizar ajustes legales a la reforma tributaria ha hecho surgir distintas propuestas entre los expertos en la materia. Una de ellas propone subir la tasa de primera categoría de un 27% a un 30%, elevando el crédito de 65% a 100%, es decir, pasar de un sistema semi integrado a uno totalmente integrado. Frente a esta posibilidad, en Asimet ha surgido la idea de que un buen sistema para tributar sería que también se baje la tasa del último tramo del global complementario a un 30%, creando así un sistema “Flat Tax”, o de tasa plana, el que ya ha sido utilizado en otras economías. El principal objetivo de la medida sería lograr un mayor grado de simplicidad y de contribución al crecimiento económico.

Esto no requeriría un sistema de créditos, y podría ser que no sea necesario llevar registros tipo FUT. Se iguala la tasa para todos los contribuyentes, eliminando en gran medida incentivos de arbitraje. Las empresas y personas deberían optar por el sistema parcialmente integrado, dado que el sistema atribuido requiere de parte del accionista o dueño de disponer inmediatamente flujos que no necesariamente estarán disponibles. El sistema que proponemos tiene la virtud de que recauda inmediatamente 3 puntos porcentuales más que el sistema parcialmente integrado.

Con esta propuesta todos estarán mejor:

- El Estado recaudará en forma cierta e inmediata 3 puntos porcentuales más. Debe considerarse que la actual recaudación de global complementario es bastante pequeña comparada con el impuesto de primera categoría, por lo tanto recaudar tres puntos más y en forma inmediata es relevante.

- Desde el punto de vista de la fiscalización, ésta se hará infinitamente más sencilla por lo que el SII debería ser mucho más eficiente en ello.

- Al igualar ambas tasas se desincentiva la creación de sociedades de inversión, lo que llevaría a una mejor y más eficiente fiscalización. Al mismo tiempo, habría una simplificación del trámite tributario para los contribuyentes.

- Se crea mayor justicia tributaria horizontal, ya que para los profesionales será neutro tributar como persona o como sociedad profesional.

- Desde el punto de vista del empresario, si bien la tasa de la empresa sufre un aumento de 3 puntos porcentuales, el dueño o socio, al recibir los retiros o dividendos, no deberá declararlos en su base tributaria, ya que estos tributaron a la misma tasa en primera categoría.

- Esto hace que las tributaciones a nivel de personas sean infinitamente más sencillas y lo mismo sucede para la empresa, lo que producirá un ahorro de costos que podría ser significativo, ya que no necesitará de grandes asesorías tributarias.

- Finalmente, si en el agregado los costos de las empresas, personas y SII se reducen, esto tendrá un impacto país positivo en la productividad, la cual se requiere desesperadamente de mejorar.

Lo más leído