Columnistas

Julio Dittborn: El gobierno del Presidente Aylwin

Director Valor Público

Por: Julio Dittborn Cordua | Publicado: Miércoles 20 de abril de 2016 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Hace algunos meses se realizó una encuesta que preguntó a los chilenos sobre la evaluación de los gobiernos desde 1990 a la fecha. Los resultados de dicho estudio muestran que los mejores mandatos han sido los de Sebastián Piñera y Patricio Aylwin (64% y 56% de los encuestados les asignan nota entre 5 y 7), mientras que los peores han sido el segundo gobierno de Michelle Bachelet y Eduardo Frei (24% y 21%, respectivamente).


Cabe preguntarse, entonces, ¿por qué dos gobiernos en apariencia tan disímiles, como los de Aylwin y Piñera, son hoy los más valorados? Pienso que hay algunos elementos comunes que posiblemente lo expliquen.


En primer lugar, ambos fueron gobiernos cortos, de sólo cuatro años, que tuvieron que asumir en condiciones muy adversas, razón por la cual debieron ponerse metas realistas y objetivos bien concretos. Nada de retroexcavadoras ni sueños refundacionales. En el caso de Aylwin, había que gobernar luego de un gobierno autoritario de 17 años, con el ex Presidente Pinochet en el Senado.


Todo ello, sin duda, exigió del ex Presidente Aylwin combinar el deber de ejercer su autoridad presidencial con mucha diplomacia en sus relaciones con las FFAA. Mirando retrospectivamente a su gobierno, creo que lo logró ampliamente. Por otra parte, asumió con cuadros técnicos sin mayor experiencia en asuntos de administración del Estado.


En el caso de Piñera, el desafío era un país devastado por el 27F, una economía profundamente debilitada por la crisis subprime y la misma falta de experiencia de sus cuadros técnicos.


Otro aspecto común fue la marcada vocación de centro que ambos evidenciaron. Uno y otro hicieron de la moderación su sello, privilegiando el diálogo y los acuerdos por sobre la confrontación y las imposiciones. Ambos apostaron a ser gobiernos de unidad nacional y, en consecuencia, promovieron el progreso en un ambiente de paz social.


Ambos gobiernos, al no postular políticas públicas refundacionales, construyeron sobre lo heredado de gobiernos anteriores. Especial reconocimiento le debemos en este aspecto al ex Presidente Aylwin, quien pese a haber sido un duro adversario del gobierno de las FFAA .y de orden, supo mantener y, en algunos casos, profundizar las políticas públicas -tanto en el ámbito económico como social- heredadas del gobierno anterior.


Finalmente, las dos administraciones se caracterizaron por priorizar simultáneamente el crecimiento económico y las políticas de protección social, compatibilizando objetivos que muchos todavía creen irreconciliables. Y, por ello, no es casualidad que los períodos de Aylwin y Piñera hayan sido los de mayor crecimiento (7,7% y 5,3%, respectivamente) y, a la vez, los de mayor reducción de la pobreza (8% y 8,8% como promedio anual).


En suma, fueron gobiernos que entendieron que en política y cuestiones sociales, como lo apuntase Isaiah Berlin, son preferibles los éxitos mediocres pero efectivos que las grandes soluciones totalizadoras. ¡Vaya contraste con la realidad actual!.

Lo más leído