Beneficios de la factura electrónica
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Luego de nueve meses de tramitación legislativa, esta semana, y por amplia mayoría, fue aprobado en el Congreso el proyecto de ley que introduce la factura electrónica, con lo cual la iniciativa quedó en condiciones de ser promulgada dentro de los próximos 10 días.
La nueva ley, que busca reducir los espacios al fraude, disminuir la evasión y hacer más expeditos los procesos de facturación y pago, no sólo reportará beneficios a la administración fiscal, sino que permitirá a los agentes privados disminuir costos en su operación y ahorrar tiempo. Entre las ventajas que se pueden mencionar destacan los menores costos burocráticos, menor gasto en papelería, archivo y registro de documentos y el menor riesgo de extravío, entre otras. Adicionalmente, se podría añadir que el mecanismo traerá aparejado un importante avance en materia de seguridad de cobro asociada a estos documentos.
Además, el nuevo cuerpo legal, que establece que la modalidad de factura electrónica será obligatoria para todas las empresas a partir de 2017, permitirá al fisco obtener una mayor recaudación tributaria de
US$ 700 millones por año una vez que esté en régimen, efecto no menor a la luz de lo que han reportado a las arcas del Estado algunas de las últimas modificaciones tributarias emprendidas en el país.
No pasa inadvertido que esta iniciativa logró una relativamente rápida aprobación legislativa. Lo anterior dice mucho no sólo de los evidentes beneficios que supone esta ley, sino de lo valioso que es para el país que el trabajo parlamentario sea expedito en cuestiones que, sumadas, van dando sustento a la modernización administrativa que se merece el país.
