Investigación de espionaje en Sofofa

La Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) ha vivido en las últimas semanas jornadas de gran convulsión. Tras el hallazgo de dispositivos electrónicos de espionaje instalados en oficinas de sus máximos directivos, el gremio industrial ha estado al centro de las miradas, con funcionarios de Investigaciones y del Ministerio Público desfilando por su sede y levantando evidencias y declaraciones encaminadas a indentificar a los autores del evidente delito incurrido por quienes montaron micrófonos y cámaras en dichos espacios.

Los hechos, en una lamentable coincidencia, saltan a la luz justo cuando el gremio también está en el foco de interés de la ciudadanía y los medios por la renovación de parte de su consejo y directivos. Un proceso que si bien llega a su desenlace con una candidatura única, por varias semanas estuvo marcado por la competencia.

Es justamaente este contexto el que impone el imperativo de que esta ingrata situación se administre con la premura, rigor y urgencia necesarias. Las autoridades gremiales salientes y las que tomarán las riendas de la entidad tienen por delante una dura prueba, de modo de hacer la mejor contribución que puedan para identificar y sancionar a los responsables. Este es el único expediente que permitirá desterrar las sospechas y forjar un ambiente interno propicio a la colaboración, que posibilite al sector empresarial hacer los aportes que se espera de él en la construcción de mejores políticas públicas y relaciones de confianza en el país. La transparencia está en la agenda de la nueva directiva y esta situación debiera ser una oportunidad inmejorable para instalarla efectivamente en las dinámicas del gremio.