Persistente sequía en el país
- T+
- T-
Compartir
La dura sequía que ya se extiende por quinto año en buena parte del país causando estragos agrícolas y ganaderos especialmente en la zona centro-norte del territorio, amén de agravar la situación de vulnerabilidad de flora, fauna y asentamientos ante los incendios forestales, ha llevado a diversos sectores productivos a adoptar medidas para hacer frente a un fenómeno que, de hecho, como han advertido las autoridades del Ministerio de Agricultura, apunta a una situación de escasez de precipitaciones de carácter más bien estructural a la que los distintos rubros e industrias deben adaptarse.
Se trata por cierto de un panorama complejo que mantiene a todos preocupados y que ha dejado en descubierto a la infraestructura de riego ampliamente superada ante la falta de lluvias, como lo demuestra la cadena de tranques y embalses secos, en una imagen que es especialmente desoladora en la Región de Coquimbo.
La creciente inquietud por la falta de agua también ha llevado a las grandes mineras que operan en la zona norte y central ha tomar medidas ante el déficit hídrico para viabilizar sus operaciones. Entre ellas, destacan iniciativas como la inversión en unidades que quitan la sal al agua de mar y plantas que permiten la recirculación del líquido en las faenas, además de mejorar los procesos de recuperación de las cada vez menores fuentes de agua.
No obstante esas iniciativas, parece haber un consenso en los sectores productivos en cuanto a reanimar con urgencia políticas públicas orientadas a aliviar el persistente déficit, tales como el traslado de agua desde el sur del país hacia las regiones al norte y una mayor inversión en infraestructura.
