Señora Directora:
El Gobierno da señales contradictorias. Por un lado, habla de reactivación económica y, por otro, hace todo lo que puede para ahuyentar a la inversión extranjera. El Presidente fue encandilado con las últimas cifras del IPSA, que en mayo anotó uno de sus mejores meses en la historia.
Lamentablemente, la experiencia hace ver que esto no durará mucho. La inflación, la guerra en Ucrania, y la desaceleración en China y en Estados Unidos, causarán potentes efectos en Chile. ¿Tomará el Presidente en cuenta estos factores o seguirá sumergido en el buenismo latinoamericano?
Juan Pablo Sims
Centro de Estudios de Relaciones Internacionales UDD