Desaceleración de la actividad

El Banco Central informó ayer que el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) registró una variación de 3,1% en el mes de marzo, muy por debajo de las previsiones de los expertos. En promedio, los economistas esperaban para el tercer mes del año una expansión relativamente moderada (en torno a 4,5%), dado que este año el feriado de Semana Santa se contabilizó en marzo. No obstante, la variación anunciada fue mucho más acotada que lo previsto, a lo que se suma que con el registro de marzo ya son dos los meses consecutivos en que la actividad se expande bajo 4%.



Las autoridades han dicho que este dato no debe ser motivo de inquietud, ya que todas las previsiones estaban anticipando un proceso de moderación en las tasas de crecimiento para el resto del año. Con todo, han advertido que se debe estar atento al ciclo y han instado a los agentes económicos a actuar con responsabilidad, habida cuenta de que el país no es inmune a las turbulencias financieras que se viven a nivel internacional.

Si bien aún es temprano para anticipar otras conclusiones, también hay expertos que advierten que los últimos datos podrían estar reflejando una cierta moderación en las tasas de inversión, en especial en sectores muy afectados por los aumentos de costos, como es el caso de la minería. Se trata de una hipótesis que no debe ser desechada, como lo sugiere la abundante evidencia que han aportado en días recientes dirigentes y ejecutivos del sector minero, quienes han estimado que la cartera de proyectos de inversión por US$ 100.000 millones prevista a 2022, podría terminar ejecutándose entre un 35% y 40% del total, dado el actual escenario adverso.