La agenda legislativa y el año electoral
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Como ocurre cada año, este mes el Congreso retoma sus actividades ordinarias. Y como ocurre cada año que corresponden elecciones presidenciales y parlamentarias -como este 2013-, rápidamente comienzan a surgir los temores acerca de que los proyectos legislativos puedan sufrir contratiempos mayores a los habituales debido al ambiente de polarización que se tiende a instalar en el país.
Lo preocupante es que para efectos de una administración de cuatro años y, aún más para Chile en su conjunto, el hecho de que los legisladores o, incluso el mismo gobierno, se enreden en discusiones vanas no tiene un costo menor.
De ahí que resultan oportunas y bienvenidas las declaraciones del ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, en cuanto a la disposición para establecer un orden de prioridades y urgencias, así como procurar un buen diálodo con las presidencias de ambas cámaras del Congreso y comisiones.
A estas alturas, es clave por ejemplo para el país que en las comisiones técnicas efecticamente se logre avanzar en los proyectos del área energética, básicamente la carretera eléctrica y la ley de concesiones eléctricas.
