Hace tres años se embarcaron en la aventura de organizar la versión chilena de uno de los festivales de música más famosos del mundo: Primavera Sound. Tenían experiencia organizando fiestas –hicieron una para 9 mil personas en Lo Barnechea- y cada uno tenía trayectoria reconocida en sus respectivos rubros: Felipe Araya como empresario de la publicidad y Cristián Camus como comunicador audiovisual, pero lanzarse a producir en Chile el festival emblema de Barcelona eran palabras mayores.
Decidieron tirarse a la piscina. Rock Stgo, la productora que crearon en 2019, firmó contrato en enero de 2021 con Primavera Pro, la casa catalana que organiza el mítico festival y desde ahí en adelante no han parado en los preparativos de la fiesta que promete tomarse parte de la ciudad la semana del 9 al 13 de noviembre y que será la prueba de fuego de Rock Stgo en la realización de festivales masivos.
“Hemos pasado por todas las emociones porque traer una franquicia tan importante, uno no se da cuenta todo lo que involucra. Todos los días aprendemos algo nuevo, hemos caminado con muchos baches, pero ya estamos acá”, dice Araya.
“Llegamos para quedarnos”
En la industria de los espectáculos masivos se especuló bastante de que al menos para esta primera vez trabajarían con alguna productora local para llevar la empresa a cabo. Se habló de Bizarro y de Lotus, pero después de darle varias vueltas, los socios decidieron que querían formar su propio equipo.
“Claramente el no saber o el no tener la experiencia previa se suple con el apoyo de 20 años de experiencia que tiene Primavera Sound en España. Hoy día estamos trabajando con un equipo muy apoyado por los españoles. Estamos liderando en conjunto la producción del festival y ha sido un gran aprendizaje”, dice Araya. Y complementa Mirena Arenas, gerente de finanzas de Rock Stgo: “Tenemos esta licencia por diez años y llegamos para quedarnos, profesionalizar más la industria y hacerla crecer, es sumamente importante lo que estamos generando”.
Ella, además de los dos socios, de Fabiola González, productora general; Dominique Jedlicky, directora general y Clara Tapia, jefa de prensa, componen el equipo base de lo que será Primavera Sound.
En las oficinas de Rock Stgo en una planta abierta de un moderno edificio en Alonso de Córdova con Vitacura, se respira la emoción. Los cerca de 50 trabajadores de la productora –aunque son 150 en total- se mueven y hablan rápido mientras coordinan detalles, responden celulares, se gritan desde un escritorio a otro para resolver dudas. Todo al ritmo de la música de fondo.
Pero hay un grupo grande que trabaja todos los días en terreno. Varios de ellos instalados tiempo completo estas últimas semanas en la comuna de Cerrillos, donde se ubica el parque que promete albergar 45 mil personas diarias, según los cálculos de la producción y en donde trabajan con la municipalidad para ultimar detalles y cumplir la promesa de ser un aporte a la comunidad.
En total, dicen en Rock Stgo, para el 15 de noviembre, van a haber trabajado 9.500 personas en el festival.
Beergarden y “curatoría”
A diferencia de Lollapalooza y otros festivales musicales, en Primavera Sound, la experiencia es además de musical, también gastronómica. El festival nació en 2001 en Barcelona al alero de la escena musical en bares y clubes donde la comida y la bebida eran parte importante de la ecuación. Por lo mismo, el fin de semana del 11 de noviembre en el Parque Cerrillos se desplegarán dos beergardens con patios de comida preparados para atender al público del festival durante todas las horas que éste dure. A diferencia de Lollapalooza, en esta versión de Primavera Sound no está contemplado incluir un sector especial para niños, aunque sí los menores de 12 años podrán entrar gratis.
Otra de las diferencias es la curatoría musical. “Nuestro público se define más bien por el lineup que es una curatoría”, explica Camus. Un detalle que es clave en la cultura de Primavera Sound, que si bien es un festival masivo, tiene una línea más de nicho. Arctic Monkeys, Lorde, Björk, José González, Travis Scott, Interpol, Inti Illimani, hablan de una selección musical en esa dirección.
“Hay un equipo de Barcelona que nos va comentando más o menos en qué va la cosa y finalmente la decisión la toman ellos y tiene que ver con cómo nos presentamos frente al público, quiénes somos. Tal vez este año no hubiese sido muy bueno traer un Bad Bunny, por ejemplo. No sé si lo hubiésemos podido traer, tal vez sí, pero acá manda la marca”, explican.
Pero también es un lugar donde los socios de Rock Stgo esperan que puedan desplegarse nuevos talentos, especialmente nacionales, como sucedió con Rosalía en España, que se coronó como diva global en Primavera Sound Barcelona de 2019.
La estrategia de “calentar motores” los días previos y tomarse diferentes sectores de la ciudad donde el festival estará presente conbandas, es otra de las características propias. Blondie, Club Chocolate, Metrónomo, Amanda y Teatro Coliseo serán los escenarios para lo que se denomina Primavera en la Ciudad.
Las lecciones de Daddy
En la industria coinciden en que hubo un antes y un después del recital de Daddy Yankee en materia de seguridad. Y los socios de Rock Stgo están de acuerdo. Los problemas del primer día de Daddy Yankee, cuando 4 mil personas sin entrada irrumpieron en el Estadio Nacional, fue un momento de inquietud en el mercado de eventos masivos.
Para Camus y Araya la seguridad es parte clave de la experiencia de usuario que quieren transmitir. “La seguridad tiene que ver con el trabajo en conjunto que se haga con las autoridades para entender el impacto de este tipo de eventos. Lo que sucedió en Daddy Yankee fue un aprendizaje en conjunto, pero nosotros ya teníamos considerado tener un doble de seguridad respecto a lo que la circular 28 (que regula los eventos masivos) solicita.
300 guardias de seguridad, anillos periféricos, detectores de metales, accesos controlados y hasta vigilancia con drones, son las medidas que Rock Stgo tiene preparadas para evitar problemas.
Sobre la inversión, prefieren no dan cifras, lo que sí, aseguran que ya tienen el 90% del festival financiado. “Creo que nos fue súper bien este año patra ser una primera edición, en un año súper complicado”, dice Camus.
Venta de entrada: Peaks y valles
La pregunta que ronda en la industria es si Primavera Sound logrará convocar a las cerca de 50 mil personas que logra Lollapalooza diariamente para su festival. Camus dice que después de Road to Primavera han tenido mucho interés por asistir al festival. “Las ventas se proyectan en el año y tienen ciertos peaks y valles asociados a los momentos de comunicación, desde el anuncio de los artistas, de las fechas, el cartel, los escenarios y así se van planificando para adelante”. relata. “Estamos bien en la proyección. Tenemos varias modalidades, algunas etapas ya las hemos terminado, sobre todo los four day pass que estaban asociados a Road to Primavera y ahora asamos a otras etapas de venta y otros tramos: three day pass (ya están agotadas), two day pass, usuarios únicos, pero vamos bien, mejor de lo proyectado en valles diarios”, agrega.
Con todo, asumen que este no será una versión del festival que traiga grandes retornos: “Tenemos que construir una marca a diez años y sabemos que es muy importante cómo te perciba el público al que nosotros queremos cautivar. Nuestro foco hoy día es la experiencia. La inversión en este proyecto va a ser del primer año y del segundo año, incluso puede ser hasta el tercero, esa es la proyección y después ir consolidándonos”.
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