Por Claudia Betancourt M.
Pasada la tormenta de la crisis de la educación, los meses estivales auguran buenas noticias en la popularidad del Presidente Sebastián Piñera, quien hoy tiene una aprobación de 35%, según Adimark.
El resultado de un estudio que se maneja en los ministerios políticos de La Moneda, arroja un repunte en la adhesión al mandatario y al gobierno en los dos últimos años de su administración: alcanzaría cifras por sobre un 40% e incluso cercanas al 50%, como ostentó al comienzo de su administración.
Para validarlo, el sondeo realiza una comparación en el mismo período entre los gobiernos de Sebastián Piñera, Michelle Bachelet y Ricardo Lagos. Durante el gobierno de Bachelet, por ejemplo, se repite la misma pauta respecto a la administración actual. Es decir, los primeros años las cifras marcaban alrededor de 44% de apoyo versus el 42% que obtuvo Piñera, lo que generaría una tendencia, además de plantear que no sería “imposible” que el mandatario tenga un repunte.
El estudio señala además algunos patrones que se repiten. La ex presidenta Bachelet enfrentó el primer año la protesta de estudiantes secundarios en la llamada revolución de los “pinguinos”, lo que provocó una baja en su aprobación, y en su segundo año, el Transantiago también la perjudicó.
En cambio, en términos de popularidad a Piñera le fue mejor que a Bachelet, pero este año obtuvo una de las más bajas aprobaciones que ha tenido un jefe de Estado provocado principalmente por las manifestaciones de los estudiantes universitarios.
Afinando la agenda
Fuentes de La Moneda consideran que hay que redoblar la agenda positiva pues el próximo año se realizan las elecciones municipales y mantener las bajas cifras de popularidad del gobierno podría significar un duro revés para los candidatos a alcaldes y concejales de la Alianza.
De hecho, los estrategas de Palacio están elaborando una agenda que permita lucir los logros y mejorar las falencias. Si bien, aún se observan altas tasas de delincuencia y los dirigentes estudiantiles ya han anunciado nuevas movilizaciones para el próximo año, las fortalezas que detectó La Moneda se ubican en crecimiento económico y la agenda social donde destacan proyectos tales como el post natal, la reducción del 7% de los jubilados, el empleo y la reciente Ley de Isapres.
De hecho, el énfasis social fue uno de los ejes que permitió a Michelle Bachelet dejar el gobierno con una popularidad que sobrepasaba el 80%, pese a que enfrentó casi dos años de crisis económica, algo similar al panorama que se presenta para el actual Ejecutivo.
“No es imposible”
Para el presidente de Adimark GfK, Roberto Méndez, efectivamente en los últimos meses y de manera consecutiva se ha visto una tendencia al alza en el respaldo del gobierno. Para él, incide que el clima social se ha tranquilizado. “No es imposible que el Presidente Sebastián Piñera suba significativamente, y de una aprobación muy baja que ha tenido este año, pase al algo normal”.
Respecto a una similitud con la alta cifra de aprobación de Bachelet -y también de Lagos cuando dejó el poder-, plantea que podría ser “probable” que este gobierno suba en los próximos meses. “No digo que vaya ocurrir, sino que podría repetirse”, afirmó el experto electoral.