Un poco menos de un mes ha pasado desde que el Gobierno ingresó al Congreso la Ley de Presupuestos 2022, erario que -como ya es tradición- promete una dura confrontación en el Parlamento, como cada cuatro años cuando la administración saliente le hereda el diseño presupuestario a la entrante. En esta ocasión, el análisis está cruzado por el histórico recorte de 22,5% del gasto total, ante la retirada de parte de las ayudas desplegadas en los últimos dos años debido a la pandemia.
Con toda la información de las partidas disponible, los comandos de las candidaturas presidenciales han profundizado el análisis del diseño en las últimas semanas, coincidiendo en la dificultad de recortar en tamaña magnitud los desembolsos del sector público. Así, los equipos encargados entregan señales de hacia dónde se dirigirá la repriorización del gasto en caso de hacerse cargo de la administración del Estado a partir del 11 de marzo próximo.
Javiera Martínez (Boric):
"No es realista" un ajuste tan brusco del gasto
En el comando del candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, la encargada de analizar "con lupa" las partidas del Presupuesto es la economista Javiera Martínez, quien también es parte del equipo programático principal del diputado por Magallanes.
"Coordino un equipo de personas con experiencia en el Ministerio de Hacienda y la Dirección de Presupuestos, así como también en la tramitación presupuestaria legislativa", explica la ingeniera civil industrial UC y magister en ciencia política de la Universidad de Nueva York.
Así, una primera definición que adoptaron en el trabajo de las distintas partidas es que no se podrá sostener una caída tan contundente del gasto el próximo año, pensando en que el país aún no supera del todo la emergencia sanitaria.
"Si bien hay que reducir el gasto transitorio provocado por la pandemia, no sólo nos parece poco realista, sino que también cuestionable constreñir bruscamente los niveles de gasto", explica Martínez, recalcando que habrá un foco especial en la reactivación de la economía a través de planes de inversión pública que prioricen una mirada "verde".
La experta enfatiza que el programa del diputado Boric contempla una reducción del déficit fiscal, objetivo que se logrará con mayor recaudación en lugar de una contención del gasto total. Y dice que establecerán una meta menos ambiciosa que la reducción del déficit estructural en un punto del PIB por año que se fijó la actual administración.
"Nuestra prioridad en materia fiscal es recuperar una trayectoria creíble y realista de consolidación fiscal estructural, la que se perdió los últimos años. Hoy aumentar la recaudación es sinónimo de responsabilidad fiscal. Tenemos un compromiso con la reducción del déficit estructural en cuatro años, pero creemos en una curva menos brusca que la propuesta por el Gobierno para el primer año", enfatiza.
Victoria Paz (Sichel):
El retiro del estímulo "no puede ser total" el próximo año
La periodista y economista Victoria Paz es la encargada programática de la candidatura de Sebastián Sichel (Chile Podemos Más) y se encuentra analizando el contenido del Presupuesto 2022 junto con el coordinador del área económica, Patricio Rojas, e integrantes de dicho grupo como Guillermo Le Fort, Gabriela Clivio y Pablo Tusso.
Y tras el escrutinio de las partidas, una de las definiciones del grupo es que si bien se debe iniciar una consolidación de las arcas públicas, parte del sobregasto deberá mantenerse para ayudar a las familias.
"Nuestro programa contempla que, en la primera parte, será necesario continuar apoyando a las familias y a las pequeñas y medianas empresas en el proceso de reactivación. Por ende, el retiro del estímulo fiscal no puede ser total en el año 2022, deberá ser gradual y focalizado, tomando también parte del año 2023", señala Paz.
Respecto a la propuesta original del Ejecutivo, la directiva valora el aumento de casi el 16% de los recursos para la promoción del empleo, el alza de un 11% en los fondos para combatir la sequía y el aumento de más del 8% para la Policía de Investigaciones.
"Es importante reforzar las líneas que responden a necesidades sociales urgentes tales como el déficit de vivienda y la brecha en salud que dejó la pandemia", detalla la alta asesora de Sichel.
Paz señala que la mayor recaudación por los cambios tributarios (aumento de ingresos para el Fisco en torno a 3 puntos del PIB en una década) y el mayor crecimiento económico les permitirá ir reduciendo el déficit estructural a razón de 0,5 puntos del PIB por año, para así mantener la relación deuda bruta a Producto por debajo del 50% durante esta década.
"Nuestro principal compromiso en materia de Presupuesto fiscal es mantener unas finanzas públicas solventes, responsables, al tiempo que avanzamos en reformas estructurales que la población justamente exige", argumenta la exejecutiva de Corfo y BancoEstado.
Hernán Frigolett (Provoste):
Si es necesario, se pedirán más recursos
El economista Hernán Frigolett es parte del grupo de expertos que se encuentra analizando el Presupuesto para adaptarlo a las necesidades del programa de gobierno de Yasna Provoste (Nuevo Pacto Social). Equipo que incluye a los coordinadores sectoriales y a enlaces con las bancadas parlamentarias, como Gabriel de la Fuente (PS) y Julio Valladares (DC), entre otros.
El exTesorero General de la República ve con "mucha preocupación" el diseño presupuestario que heredaría una eventual gestión de la senadora, ya que considera "insuficiente" la planificación en materia de reimpulso y reactivación económica.
"La impronta del Presupuesto debe ser de una fuerte reactivación, pero no para lo que vemos hoy de volver a niveles previos a la pandemia, sino de generar un verdadero plan para crecer más de 2,5% en la próxima década", apunta.
Así, plantea que una primera definición será empujar un crecimiento mayor del gasto en capital, en específico la inversión pública que se expande más de un 8% en la propuesta del Ejecutivo. Así, apuntan a crecer entre un 15% y 20% el próximo año.
"Probablemente, veremos una muy baja ejecución en el primer trimestre del próximo año, pero a partir de marzo queremos apurar el desarrollo de proyectos estatales. La reactivación para por un gasto más agresivo en inversión", recalca.
Frigolett también señala que si es necesario, solicitarán al Congreso autorización para obtener recursos adicionales y contener la caída del gasto a un número en torno al 10%.
Respecto al compromiso de reducción del déficit estructural, el académico señala que apuntan a un saldo negativo que oscile entre el 2% y 3% del PIB para el término del período presidencial.
"Apuntaremos a una reducción menos ambiciosa que la que propone el actual gobierno ya que todavía se necesita un impulso fiscal. De todas maneras, aquello dependerá de la reforma tributaria que implementaremos en la próxima administración", argumenta.
Eduardo Guerrero (Kast):
Con nuevas cuarentenas, sería "poco realista" el ajuste
El economista Eduardo Guerrero lidera el análisis del Presupuesto 2022 en el comando de la carta del Partido Republicano, José Antonio Kast, en conjunto con el también economista Carlos Gómez.
Guerrero plantea que un potencial reenfoque del diseño presentado por el actual Ejecutivo dependerá de la evolución de la pandemia.
"Si eventualmente fueran necesarias nuevas cuarentenas, sería poco realista dicha reducción. Sin embargo, nuestro escenario base es que el próximo año tendremos un año de mayor normalidad, lo que permitirá retirar paulatinamente los estímulos fiscales", manifiesta.
En esta línea, recalca que buscarán dar las señales "correctas" al mercado con el recorte del gasto en 2022, "pues basta de políticas populistas que están causando un severo daño a los más vulnerables, con el impuesto a los superpobres asociado a la inflación".
Si bien no se decanta por una cifra específica de reducción del déficit estructural en los cuatro años de gobierno, Guerrero sí define que las medidas de austeridad permitirán contener el aumento de la deuda pública, el alza de la inflación y reducir algunas restricciones regulatorias -dice- al sector privado.
"Tenemos un profundo compromiso con la sostenibilidad fiscal, pues cuando ella se daña los más afectados son precisamente los más pobres y la clase media, con los nefastos efectos asociados a una mayor inflación y costo de la deuda, además del negativo impacto en actividad económica y generación de empleos", señala. Así, ratifica el compromiso de Kast de reducir el tamaño del Estado en una virtual próxima administración.
"Nuestras propuestas económicas apuntan precisamente a cortar la burocracia y el gasto político, además de reimpulsar la inversión y las medidas pro crecimiento, que nos van a permitir ponernos en la ruta del balance estructural", apunta el también director de empresas.
Camilo Lagos (ME-O):
Hay espacio todavía para continuar aumentando la deuda estatal
El economista y presidente del Partido Progresista (PRO), Camilo Lagos, está abocado a la labor de revisar partida por partida presupuestaria para el candidato de dicha tienda, Marco Enríquez-Ominami.
El encargado del programa económico del exdiputado comparte con las otras candidaturas que es prematuro pensar en un retiro de las ayudas estatales cuando aún no está resuelto el panorama sanitario.
"El próximo año y los que vienen no serán fáciles. Los impactos de la pandemia seguirán presentes por varios años más. Pensar que la caída de los contagios es la superación de la crisis es ingenuo y hasta irresponsable", asegura.
En este sentido, plantea que el erario debe continuar con el impulso fiscal a los sectores productivos, planteando inclusive que puede continuar aumentándose la deuda pública, que ya supera el 30% del PIB.
"El gobierno de Marco Enríquez-Ominami tendrá un compromiso por estimular la fuerza productiva y proteger a los y las más necesitadas. Las tasas de endeudamiento público aún son aceptables para economías en desarrollo, y creemos que hay espacio, incluso, para aumentar el endeudamiento público, para recuperar la economía nacional. Por eso, proponemos un endeudamiento del orden del 50% del PIB, para impulsar la economía y proteger a los más necesitados", dice.
Más que comprometer una meta de rebaja del déficit estructural, Lagos expone la necesidad de llevar a cabo un debate sobre la regla fiscal que rige las finanzas públicas hace 20 años.
"Un debate que nos permita definir esa regla en función de nuestros desafíos de desarrollo y equidad que tenemos como país, y que quedaron expresados mayoritariamente con el estallido del 18 del octubre. Y una vez que tengamos ese consenso, tener un itinerario creíble para retomar esa regla", asegura, deslizando la posibilidad de apartarse de la regla de continuar la emergencia sanitaria.
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