¿Héroe o villano? Después de dos años de operaciones en Chile, finalmente el Ministerio de Transportes le declaró la guerra a Uber, la startup que ofrece transporte a través de una app.
El guión es parecido a lo que ha ocurrido en cada país al que la compañía hace su arribo. Tal como en España, México o Francia, en Chile, Uber desató la ira de los taxistas quienes la acusan de ilegal. Ayer el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo dijo que continuarán la fiscalización y retirarán los autos ligados a la empresa por ser piratas.
Los taxistas chilenos y de todo el mundo alegan lo mismo: los conductores de Uber no pagan los mismos impuestos que ellos y tampoco se les exige lo mismo.
Por otro lado, a quienes les gusta Uber sostienen que el servicio es más barato y práctico y lo ponen como ejemplo de la nueva economía colaborativa.
En el intertanto, la compañía ha crecido en Chile, pues tiene cobertura en las 36 comunas de Santiago y en Viña del Mar.
Hace poco, Carlos Schaaf, gerente general de Uber Chile señaló a Diario Financiero que este año pensaban crecer en un 1.000% y traer nuevos servicios y seguir expandiéndose por el país.
La startup comenzó sus operaciones en Chile en 2014 con el servicio Uber Black de autos de alta gama y luego sumó Uber X de perfil más masivo. Ya cuenta con más de 100.00 usuarios registrados -que descargaron la app- y más de 20 mil personas que demostraron interés en ser socios conductores.
Para este año, tienen contemplado introducir Uber Bici, autos equipados con soporte para bicicletas, que permiten al usuario dejar de pedalear si ya está cansado o se ve en la necesidad de recorrer una mayor distancia.
También implementarán Uber Angel para los que se pasaron de copas y necesitan que alguien los vaya a buscar y les maneje el auto.
Además, lanzarán Uber Rush y Uber Eats, las dos enfocadas en el servicio de delivery, la primera con foco en la entrega de bienes -por ejemplo las compras hechas a través de Internet- y la segunda en comida.
Regulación
Al final, todo parece indicar que el destino de Uber en Chile será parecido a lo que ha ocurrido en otros países: terminará siendo regulado y convivirá en paralelo con los taxis básicos.
Uno de los países donde Uber encontró mayor resistencia fue en España, recién este año pudo volver luego de dos años de ausencia, después de que se le acusara de competencia desleal.
Y esta vez su arribo fue con conductores que cuentan con licencia de conducir profesional y con el servicio Uber X.
Esta nueva fórmula buscó despejar dudas luego de que en su primera etapa en España varias organizaciones la acusaron de fomentar la economía sumergida. La empresa destacó en su reingreso a ese país que había alcanzado acuerdos con la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos para impulsar la fiscalización de la actividad que realicen los conductores.
La startup en Chile
Inicio. Uber llegó a Chile en 2014 con su servicio Uber Black de autos de alta gama. Luego introdujo Uber X de corte más masivo.
Crecimiento. La startup cuenta con más de 100 mil usuarios registrados y más de 20 mil personas que demostraron interés en ser socios conductores.
Planes. La estrategia de la compañía es extenderse a otras regiones. Ya operan en Santiago y en Viña del Mar.
Uber Bici. Los planes de la empresa contemplan la introducción del servicio Uber Bici que consiste en autos equipados con soporte para bicicletas, que permiten al usuario dejar de pedalear si ya está cansado o se ve en la necesidad de recorrer una mayor distancia.
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