Congreso busca mayor regulación para auditoras y más facultades a superintendencias

Por José Manuel Duarte



Luego de un 2011 de gran actividad en materia de regulación financiera, con proyectos como el de deuda consolidada y de rebaja de la Tasa Máxima como emblema, diputados y senadores estarían mirando ahora a las industrias de clasificación de riesgo y auditoría, junto con el funcionamiento de las mismas superintendencias, como nuevos objetivos sobre los que podría aplicarse una legislación más estricta y amplia.

Esto al ver que medidas como entregar mayores atribuciones investigativas y acceso más amplio a los estados financieros de las firmas, así como mejorar la autonomía de los reguladores, incrementarían la capacidad de fiscalización de los reguladores y evitarían irregularidades como las que evidenció La Polar.

El senador José García Ruminot (RN) es claro al respecto: “No debemos olvidar lo ocurrido con La Polar”, en cuanto tras conocerse el escándalo se dispararon una serie de alarmas sobre la real capacidad de tanto las auditoras como la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) para fiscalizar a sus regulados.




Mejorar a los reguladores


Que las superintendencias requieren una nueva normativa para ampliar sus capacidades fiscalizadoras y mejorar su autonomía, es una idea compartida en el oficialismo y la oposición. El diputado Gonzalo Arenas (UDI), presidente de la comisión de Economía de la Cámara, estima que es el momento de “dar mayores atribuciones tanto a la SVS como a la Superintendencia de Bancos (SBIF)”. Incluso, el parlamentario oficialista considera que se puede a la primera en una Comisión de Valores, que vigile tanto el mercado mismo como a los actores aledaños a éste; en este caso, clasificadoras de riesgo y auditoras.

La iniciativa tiene eco en la Concertación, aunque con matices. El diputado Jorge Burgos (DC) asegura que “lo que queda pendiente es un esquema orgánico para el régimen de superintendencias. Según el parlamentario, que el financiamiento de la SBIF provenga en parte de sus mismos regulados -los bancos- es una “debilidad endémica” del sistema que corresponde mejorar.




Otras iniciativas


Los parlamentarios también esperan que durante este año se comiencen a implementar medidas para aumentar la competencia en el sistema financiero, lo que debería mejorar las condiciones para los usuarios.

El senador Eugenio Tuma (PPD) afirma que cualquier regulación “debe garantizar que se terminen los abusos contra las personas”. En esa línea, considera que aumentar la competencia bancaria es vital, por lo que llama a reducir las barreras a entidades extranjeras que deseen operar en Chile.

Por su parte, el diputado Felipe Harboe (PPD) cree que para el Congreso los bancos no están libres de malas prácticas y, por lo tanto, deben ser objeto de mayor regulación. Por ello, pidió al regulador, Raphael Bergoeing, garantizar que esas entidades no mantengan registros históricos de las deudas de los clientes.

Harboe no descartó en proponer un proyecto que sancione el uso de estos registros, como parte de sus esfuerzos por potenciar iniciativas que contribuyan a la protección de la información de los usuarios.

Con respecto a los proyectos que actualmente se encuentran en discusión, las opiniones están divididas. Si para el diputado Joaquín Godoy (RN) los proyectos del gobierno “han sido transgresores y van bien encaminados”, el senador Tuma considera que “van en la dirección correcta, pero todavía no son suficientes”.