Buena evaluación entre expertos sacó la idea de concretar una eventual venta de la red de ocho clínicas de Empresas Masvida, opción que corre con ventaja según dijo el presidente del holding, Claudio Santander, para rescatar a la Isapre de su difícil condición financiera.
¿Por qué sería atractivo el negocio? Expertos en temas de salud dicen que es buena opción, perfectamente realizable, dado que muchos de estos centros tienen una alta demanda. Otras fuentes creen que dado que es probable que en algún minuto cambie la regulación de las Isapres, avanzando hacia seguros de salud, quien cuente con una red de recintos como estos, podría participar de buena forma en ese negocio.
Empresas Masvida participa en el negocio de clínicas a través de MV Clinical, donde tiene 77% de propiedad, y el resto corresponde a cinco sociedades de inversión. Con esa sociedad llega a sus ocho establecimientos.
Las mayores participaciones de MV Clinical están en MV Clinical Health Care (100%), Clínica Las Lilas (96,72%), Clínica Universitaria de Concepción (79,60%) y Clínica El Loa (74,94%).
En cuanto a niveles de ocupación, los recintos tienen un buen desempeño, con 63,70% como promedio. Clínica Universitaria de Concepción llega incluso al 78,52%, seguida por Las Lilas con 70,29%, Isamédica con 65,59%, y Clínica Chillán con 60,28%. Como referencia a noviembre de 2016, Clínica Santa María tenía una ocupación de 78% y Dávila tenía 77,53%.
En cuanto a camas, las que cuentan con el mayor número a 2015, son Las Lilas (92), Isamédica (90) y la de Concepción (76).
Según comentó la gerencia general de la sociedad de clínicas en la memoria de Empresas Masvida, “el 2015 estuvo marcado por una pérdida de $ 4.562 millones derivado, por una parte, de nuestros índices de endeudamiento y, por otra, de los malos resultados obtenidos en las clínicas Las Lilas y Universitaria de Concepción”. En el 2014 la sociedad también registró pérdidas por $1.075 millones.
Puntos a favor y en contra
El ex ministro de Salud Jaime Mañalich sostiene que si bien desconoce la situación financiera de las clínicas, éstas tienen una perspectiva de actividad interesante, ya que mientras la industria de Isapres tiene más riesgos, las clínicas tienen mucha demanda, tanto privada como pública, especialmente las de Concepción y de Puerto Montt. Aunque advierte que, por ejemplo, en Las Lilas podría darse una situación distinta, porque tiene aspectos comerciales que podrían ser más complejos.
Otras fuentes del sector señalan que dado el problema que tuvo la búsqueda de un socio para el holding, esta opción es la única que puede tomar el grupo de médicos para salir de la difícil situación financiera de forma expedita.
“En el estado en que están sus estados financieros, lo único que queda es vender los principales activos, que son los terrenos, los proyectos en construcción y las clínicas”, dicen.
Sin embargo, dado la incertidumbre que hay en torno a la empresa hay ejecutivos de la industria que creen que es posible que finalmente no se vendan ni las clínicas, ni la Isapre. Es que a su juicio hay establecimientos que tienen malos desempeños, y además es muy probable que las negociaciones que habría en curso no lleguen a puerto por los números que tiene el holding.
Por eso, será clave ver qué sucede en la reunión de directorio que está citada para mañana, donde se deberían presentar dos interesados en estos activos, uno de ellos por el paquete completo. En el mercado ponen énfasis en dilucidar cómo está estructurado el holding y cuál es el aporte real de cada clínica en la que tienen presencia.
¿Cómo van las negociaciones?
Sólo un día ha pasado desde que el presidente de EMV, Claudio Santander, dio a conocer algunos detalles de los tres posibles interesados. Ahí aseguró que la opción que corre con ventaja es vender la red de clínicas a un inversionista chileno que tiene experiencia en el rubro de salud, aunque sin presencia en clínicas.
Hace un par de semanas que en el mercado se especula con que el aludido es Guillermo Harding, ex dueño de Farmacias Cruz Verde. Aunque ha habido acercamientos -porque se le habrían acercado al empresario-, no está claro aún que Harding vaya a concurrir con una oferta concreta.
Por el lado de Southern Cross tampoco habría avances. Aunque sigue abierta la posibilidad, hay quienes lo ven difícil porque el due diligence no fue satisfactorio, lo que deja dudas respecto del estado en que encontraron la compañía.
La otra oferta que se barajó en el primer proceso fue la de Gamma Capital, aunque dado que ellos no hicieron due diligence, fuentes conocedores aseguran que hoy no existen conversaciones de ningún tipo.
Así, corre el plazo para que Empresas Masvida presente un plan de ajuste financiero a la Superintendencia de Salud. Según consignó La Segunda, la Isapre habría interpuesto un recurso para eximirse de dicha obligatoriedad, pero finalmente no tendría efecto.