Las ventas navideñas no habrían sido suficientes para reactivar la desaceleración que se ha estado viendo en el retail en estos últimos meses, algo que algunos estudios ya habían vaticinado al pronosticar que las fiestas de fin de año no lograrían mejorar un cuarto trimestre debilitado.
Un recorrido por distintos retailers en la zona oriente, para constatar el desempeño de las ventas de Navidad evidenció que la realidad se acerca bastante a los pronósticos, aunque aún falta conocer los balances finales que harán las compañías.
El flujo de personas en las tiendas -coinciden distintos actores del comercio- habría sido inferior al que se registró el año pasado.
Aunque aún no está claro si las ventas cayeron, entre trabajadores y encargados de tiendas creen que podría verse una leve contracción. En el mejor de los escenarios, podría mantenerse el nivel de 2013, dicen.
Lo que sí está claro es que el gasto promedio por persona estuvo más moderado que en ocasiones anteriores.
En firmas de vestuario internacional concuerdan que no se lograron alcanzar las metas fijadas.
Francisco Salles, encargado general de Zara en Costanera Center, estima que vendieron un 10% más, pero el promedio por persona fue inferior a otras veces, con cerca de $ 17.000.
En Falabella, algunos de sus empleados estiman que las ventas en el sector oriente habrían caído, con excepción del local de Costanera Center, donde podrían haber aumentado un leve 1%.
En Ripley, trabajadores estiman que se habrían alcanzado los objetivos, aunque las ventas variarían en función del área. De hecho, confiesan que las ventas podrían haber sido mayores, pero habría habido algunas dificultades con el stock.
En Paris -como en el resto de firmas-, dicen que las ventas comenzaron lentas y sólo aumentó el ritmo a pocos días de Navidad. De todos modos, se cree que podría haber un incremento de entre 5% a 7% en las transacciones.
Productos
Pero hay realidades distintas. En especial si se miran distintos productos. Así, si bien vestuario y calzado se habrían visto resentidos, otros se beneficiaron.
En perfumería, por ejemplo, se vio un mayor dinamismo, impulsado por una alta presencia de ofertas.
En cosméticos, sin embargo, se habría sentido la desaceleración. Algunos trabajadores cuentan que costó mucho vender algunos productos, por lo que no sería extraño ver un recorte en los ingresos de este segmento.
Tecnología -como ha venido sucediendo en ocasiones anteriores- se vio dinámica, así que se esperan buenos resultados para esta temporada navideña.
Mayor endeudamiento
Según un estudio sobre el comportamiento de compra de los chilenos en Navidad, realizado por Research Chile OmnicomMediaGroup, la desaceleración económica ha repercutido en la forma de pago, con mayores personas optando por endeudarse. Días previos a Navidad se señaló que las personas se mostraban más dispuestas a utilizar tarjetas de crédito que en otras oportunidades.
Lo que no variaría eran los productos más regalados, con vestuario, juguetes y perfumes. Pero surgieron también las gift cards y tablets, como alternativas.