Los precios de las bencinas volverán a subir a partir de mañana, según dio a conocer hoy la Empresa Nacional de Petróleo (ENAP).
De esta manera, tanto la gasolina de 93 octanos como la de 97 subirán en $ 5,5 por litro. Por su parte, el valor del diésel bajará $ 3,2, mientras que el kerosene experimentarán una baja de $ 3,8 por litro.
Según la estatal, durante el período de referencia, el precio del crudo fue presionado por el debilitamiento de las expectativas de mercado sobre el resultado final que tendría la reunión entre los países miembros de la OPEP y Rusia, debido a que surgió información que permitía concluir lo ineficaz que sería el congelamiento de la producción para aliviar el actual excedente de crudo, focalizando la atención en otros mecanismos de estabilización, cuyos acuerdos serían más difíciles de lograr.
En este sentido, agregaron, se destaca el reporte de la Agencia Internacional de Energía (EIA) el cual sugería que un congelamiento de la producción no afectaría sustancialmente el balance de mercado por dos motivos. En primer lugar, debido a que la OPEP estaría produciendo a niveles records y de mantenerse estos niveles no se afectaría de forma sustancial la cantidad de crudo imperante. En segundo lugar, debido a que la demanda por crudo se estaría debilitando a raíz de peores perspectivas económicas para los países en vías de desarrollo.
Más aún, lo anterior fue también reforzado por las informaciones surgidas al interior de la OPEP. Libia anunció la restauración inmediata de sus exportaciones desde puertos que habían sido tomados por milicias rebeldes, lo que permitiría aumentar sus niveles de producción, desde los 210.000 b/d hasta los 600.000 b/d.
Asimismo en Nigeria, un manifiesto de cese al fuego por parte de los Vengadores del Delta de Níger, permitió que importantes empresas que operan en este país, comenzaran a restaurar sus exportaciones y lo que traería el crecimiento de su oferta en 500.000 b/d.
En el mercado internacional de la Costa del Golfo (USGC) los precios de los productos refinados siguieron la tendencia del crudo pero también respondieron a sus propios determinantes. Tal es el caso de la gasolina, la cual dado el fin de la temporada estival norteamericana, ha visto disminuido sus inventarios significativamente y su demanda se vio fortalecida con la reactivación de un importante oleoducto gasolinero. De forma contraria, el kerosene y el diesel han visto aumentadas sus existencias.
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