“Las declaraciones de Francisco Vidal fueron
desafortunadas”. Así de categórica fue la evaluación privada que
realizó una alta fuente de La Moneda para comentar el impacto público
generado por las expresiones del vocero de Gobierno criticando al
empresariado por el alza de los despidos, a pesar de las altas
utilidades obtenidas por las empresas en 2008.
Claro que sólo
fue el corolario de un intenso y fluido intercambio de opiniones
registrado ayer en Palacio, y donde incluso el vicepresidente de la
República, Edmundo Pérez Yoma, tuvo que aclarar los alcances de esos
dichos a los tres presidentes de los partidos de la Concertación que
llegaron a la reunión del comité político.
Durante la cita los
timoneles del oficialismo cuestionaron la estrategia usada por el
Ejecutivo para abordar el problema del desempleo originado por la
crisis y lo instaron a moderar el lenguaje con una mirada de mayor
unidad nacional.
Minutos después de hecha la petición, el
ministro secretario general de Gobierno (s), Neftalí Carabantes, bajó
el tono a la polémica aclarando que “el gobierno y los empresarios hoy
tienen una sociedad de futuro basada en la confianza y en la solución
conjunta de los desafíos que vienen”.
Añadió que “el
gobierno y los empresarios son un solo equipo” y, precisó que “lo que
ayer (lunes) señaló el ministro Vidal fue algo muy responsable; hizo un
llamado al mundo privado, al mundo empresarial a que también se suban a
este carro y empujen juntos con el gobierno el carro de la economía”.
Pero
no fue la única autoridad que aclaró el tema porque horas más tarde, y
tras analizar en privado el tema laboral con Edmundo Pérez Yoma, la
ministra del Trabajo, Claudia Serrano, precisó: “No creo que los
empresarios sean un conjunto de malas personas; hay empresarios y
empresarios y no establecería tipos”.
Luego añadió que “nosotros (gobierno) creemos que este es un país que necesita unidad nacional para enfrentar un año difícil”.
Y
al ser consultada sobre las expresiones de Vidal, la ministra declinó
responder directamente explicando que “no quiero hacer una declaración
de buenos y malos, porque todos estamos en una tarea que es proteger el
empleo de los trabajadores”.
Comité político
El
giro impreso ayer por las autoridades a la polémica con los
empresarios, fue analizado largamente en la reunión extraordinaria que
convocó el vicepresidente de la República, Edmundo Pérez Yoma, con los
timoneles del oficialismo, en las oficinas del Ministerio del Interior.
Claro que a la cita, y producto de las vacaciones, faltó el
representante del Partido Por la Democracia (PPD) y, en el caso del
Partido Socialista (PS), asistió el secretario general de la
colectividad, Marcelo Schilling. A él se sumaron el presidente DC, Juan
Carlos Latorre, el timonel del PRSD, José Antonio Gómez y los ministros
subrogantes de la Presidencia, Gobierno y Justicia.
Según
varias fuentes que estuvieron en el encuentro, hubo unanimidad en
calificar las expresiones de Vidal como un error, lo que incluso habría
sido respaldado por Edmundo Pérez Yoma.
Pero a la salida de la
reunión sólo el timonel radical exteriorizó su molestia precisando que
“fue un error lo que se hace, de salir a pelear con el empresariado; al
revés, uno tiene que tratar que esta situación, que es grave para
todos, sea resuelta en común”.
Oposición
Y
las criticas también llegaron desde la oposición. El diputado UDI,
Felipe Ward, acusó a Vidal de “doble estándar” y señaló que “hacer un
llamado sesgado perjudica en vez de beneficiar”.
En tanto, el
diputado Cristián Monckeberg (RN), dijo que “el ministro Vidal se
equivoca radicalmente de que unos lo han hecho y otros no, es una
diferenciación mal intencionada y de bajo calibre, él cada vez que
interrumpe sus vacaciones comete errores garrafales”.