La nueva ofensiva china: ahora se lanza contra el karaoke y el alcohol después de horas de oficina

E. White en Seúl, H. Lockett en Hong Kong, S. Fei Ju y R. McMorrow en Beijing

Las autoridades en China están tomando medidas para reprimir una cultura de consumo excesivo de alcohol después del trabajo a medida que Beijing lucha por responder a la creciente indignación ante las acusaciones de agresión sexual contra mujeres.

La Comisión Central de Inspección Disciplinaria (CCDI, sigla en inglés), el organismo de control anticorrupción del Partido Comunista Chino, dijo que la presión para beber podría conducir a delitos y que estas prácticas deberían ser reemplazadas por "valores correctos", según un comentario en su sitio de Internet.

Por otra parte, el Ministerio de Cultura dijo que planeaba prohibir las canciones de los lugares de karaoke que difunden "información dañina". Estos incluían canciones con letras que supuestamente inspiran a los oyentes a consumir drogas, juegos de azar y religión, así como contenido que se considera que pone en peligro la soberanía china. Se animó a las empresas que suministran canciones a los lugares a marcar las letras que eran potencialmente problemáticas.

La represión del comportamiento que se considera inapropiado es la última de una serie de acciones regulatorias que han atrapado a las empresas chinas, incluidas algunas de las empresas de tecnología y juegos más grandes del país, y han afectado a los inversionistas globales.

Impacto en las empresas

La advertencia del CCDI sigue a las acusaciones de que un gerente de Alibaba, el grupo de tecnología, agredió sexualmente a una empleada. Posteriormente, el gerente fue despedido, pero el episodio ha arrojado luz sobre la cultura empresarial del alcohol.

Los comentarios del organismo sacudieron las acciones de las empresas de licores. El precio de las acciones de Kweichow Moutai, el mayor productor de licores del mundo que elabora una bebida blanca llamado baijiu, cayó 2,7% hoy miércoles. Las acciones de Shanxi Xinghuacun Fen Wine, otro fabricante de licores blancos, cayeron 2,49%.

El movimiento #MeToo de China se ha aprovechado de un sentimiento de insatisfacción entre los trabajadores jóvenes, lo que plantea un desafío complejo para los líderes corporativos y políticos en Beijing.

Los pasantes de Tencent, el grupo tecnológico, han pedido a la empresa que prohíba la presión social para beber, según los mensajes internos de la empresa compartidos en Weibo, la versión china de Twitter.

Martin Lau, presidente de Tencent, dijo que las sugerencias se enviarían a recursos humanos. La compañía, agregó, tiene tolerancia cero para cualquier forma de acoso sexual.

"Una de las consecuencias de la situación de MeToo es que probablemente vamos a obtener una mayor regulación del entretenimiento", dijo Thomas Gatley, analista de Gavekal Dragonomics, el grupo de investigación con sede en Beijing.

Ng Jun Ying, analista de Fitch Solutions, señaló que Beijing no había confirmado nuevas regulaciones sobre la industria del alcohol. "En el muy corto plazo, las ventas de alcohol probablemente se dispararán a medida que los consumidores chinos acumulen productos en anticipación a cualquier represión", dijo.

"Sin embargo, es muy plausible que las autoridades intervengan en la industria del entretenimiento a la luz de los recientes desarrollos", agregó Ng.

Momento de apretar

Gatley dijo que la "intensidad y el tono" de la represión se atenuarán y apunto a señales de coordinación entre los reguladores para "proporcionar un entorno político más estable y predecible para las empresas y los inversionistas".

Los legisladores en Beijing han argumentado que este año fue un buen período para promulgar una variedad de reformas estructurales a raíz de la robusta recuperación económica del país desde las profundidades de la pandemia, agregó Gatley.

“Probablemente al comienzo se pensó que era un esfuerzo centrado en la reforma económica (…) Pero no es demasiado sorprendente que estos otros conjuntos de prioridades regulatorias se hayan planteado y acelerado durante un período en el que se consideró una buena oportunidad para hacer algunos cambios dolorosos en un momento en el que las cosas van muy bien” dijo.