Por A. Chávez / R. Carrasco /
C. Betancourt
Una nueva arista se abrió ayer en la discusión del proyecto de ley de Presupuestos 2012, cuando desde La Moneda se anunció la posibilidad de vender algunos activos del Estado en empresas públicas, para suplementar los recursos destinados a la educación. Todo esto en medio del inicio del trabajo de la comisión mixta de Presupuestos y cuando trascendió la posibilidad que se geste un acuerdo entre el gobierno y la oposición para destrabar la aprobación de la partida de educacional. Sin embargo, en el Congreso fuentes de La Moneda señalaron que la apuesta del Ejecutivo será mejorar la glosa de dicha cartera, pero solamente en el debate final que se dará en la sala y no antes.
Ello para evitar -según dijeron- lo vivido el año pasado, cuando se alcanzó un acuerdo en la mixta entre el gobierno y la Concertación que involucraba diversas partidas. Este no fue respetado por los parlamentarios del bloque de oposición al momento de ratificarlo en la discusión en la sala, lo que obligó a los ministros a abrir un nuevo espacio de negociaciones para zanjar un nuevo protocolo que permitió que se aprobara el erario vigente este 2011.
De acuerdo a los análisis hechos en palacio, la estrategia apuntará a mejorar en la mixta todos los problemas que se presenten en la discusión de otras glosas del presupuesto, como los recursos del Ministerio de la Cultura, Seguridad Ciudadana, Ministerio del Interior y del Poder Judicial, entre otros, para así dejar como único gran tema la partida relativa al Ministerio de Educación.
Coordinación opositora
En paralelo, los parlamentarios de la Concertación protagonizaron ayer una serie de reuniones para afinar los pasos a seguir en el debate del erario. Una de las primeras citas la encabezaron los presidentes del pacto, Carolina Tohá (PPD), Osvaldo Andrade (PS), y los senadores Ignacio Walker (DC) y José Antonio Gómez (PR). El encuentro que se realizó previo al inicio del trabajo de la comisión mixta, también fue la ocasión para que los timoneles del conglomerado intercambiaran opiniones con sus pares del Partido Comunista (PC), diputado Guillermo Teillier y del MAS, senador Alejandro Navarro, a fin de zanjar una posición común para actuar como bloque. Esta se plasmará en un documento que debería estar listo a más tardar el próximo 10 de noviembre.
Teillier destacó que “estamos buscando un patrón común para actuar tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, lo que será una prueba para saber si podemos actuar juntos como oposición”.
En la ocasión, los titulares resolvieron mandatar a los senadores Andrés Zaldívar (DC), Gómez y los diputados Carlos Montes (PS), Pepe Auth (PPD), además del mismo Teillier como los responsables de abrir un espacio de diálogo y negociación con el gobierno para abordar un conjunto de materias que están pendientes en el debate del presupuesto, y que van más allá de la partida de educación.
Adicionalmente, a la hora de almuerzo los parlamentarios de la Concertación que integran la mixta de Presupuestos se volvieron a reunir para definir las prioridades que tendrán en la discusión. Fue ahí donde compartieron un documento elaborado por el equipo técnico y donde fijan una postura sobre 9 puntos a poner en el debate y que no sólo se centra en el tema educacional. En el bloque descartan la posibilidad de alcanzar un acuerdo con el gobierno en lo que respecta al presupuesto para la educación y que ello implique aprobar las restantes partidas del erario.
De ahí que si bien insistirán en que buscar que el gobierno se comprometa a crear por ley el Fondo de Educación, de US$ 1.000 millones adicionales a los ya planteados por el Ejecutivo, que opere con una institucionalidad similar al FEES, que esté regulado y sujeto a compromisos concretos de gastos, los parlamentarios de la oposición también buscarán un pronunciamiento del Ejecutivo en reconstrucción, Seguridad Ciudadana, Apoyo a la Generación de Empleo; Desarrollo Regional, Fomento a la Eficiencia Energética y una mayor regulación de la partida del Tesoro Público.
De ahí que Zaldívar precisara que “no vamos a establecer que porque demos un acuerdo en educación vamos a estar por aprobar todo el presupuesto. Lo vamos a revisar partida por partida, es nuestra obligación y haremos las indicaciones que sean necesarias para evitar la discrecionalidad en el gasto. Hay muchas glosas en que hay recursos que tenemos que regular, sobre todo en un año de elecciones, cuando no se le puede dar a la autoridad política una discrecionalidad tan alta en los gastos”.
Venta de activos
La decisión del gobierno de recurrir a la venta de activos para allegar recursos para la educación fue anunciada a primera hora de la mañana de ayer y de forma sorpresiva por el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet. Este recordó que “hace algunos años el ex presidente (Eduardo) Frei formó una comisión -Brunner-, donde también se planteó una reforma para mejorar la calidad de la educación escolar. Allí se planteó como uno de los instrumentos la venta de algunos activos. No es descartable que ese instrumento también se considere ahora”.
Asimismo y tras reunirse con el presidente Sebastián Piñera, el ministro de Economía, Pablo Longueira, ratificó dicha posibilidad, pero introdujo un matiz. “La forma en que los chilenos decidamos como levantar esos recursos también tiene que ser consensuada y no hay que descartar ninguna fórmula (…) dichos financiamientos deben ser para aquellas materias que necesitan financiamientos por una vez. No podemos estar financiando gastos permanentes con ventas de activos”, evidenciando la discrepancia que habría en el gobierno respecto del tema.
En tanto, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, no escondió su sorpresa al señalar que “no tengo ninguna observación que hacer sobre el tema venta de activos”, precisando que la venta de las sanitarias reportó del orden de US$ 1.500 millones y que “esos recursos están algunos incorporados al presupuesto y otros donde deben estar, en Corfo”.