Por Ángela Chávez M.
En medio de las informales conversaciones que han sostenido el gobierno y la oposición por la definición de la carta para llenar la vacante que quedó en el Consejo del Banco Central, luego que José De Gregorio (DC) dejara el cargo -a principios de diciembre-, escasamente se ha planteado la opción de una mujer para el cargo.
Es que pese a que en ambos sectores reconocen que la posibilidad que una mujer llegue al ente rector es una alternativa, también se preguntan “¿quién?”, pues si bien afirman que en el país hay “muy buenas economistas”, también advierten que son pocas las profesionales con la “expertise” en macroeconomía y mercados financieros y bancarios, como para ocupar un sillón en el Central.
Es más, recuerdan que a mediados de la década de los ‘90, la economista y académica MarÍa Elena Ovalle se convirtió en la primera mujer en ocupar un lugar en el Consejo del organismo, su designación en el tiempo resultó polémica.
De ahí que fuentes oficialistas admiten que aún cuando se evaluó postular una mujer, en una apuesta que además les permitiría salir jugando porque consideran que a la Concertación le resultaría complicado “vetarla”, al buscar no encontraron una candidata.
Y si bien trascendió que inicialmente se pensó en la actual directora de Presupuestos (Dipres), Rosanna Costa, y cuyas capacidades han sido reconocidas por todos los sectores, dicha posibilidad habría quedado descartada porque implicaba “desmantelar” la repartición, lo que le generaría una nueva complicación al gobierno al tener que buscar a su reemplazante en un momento complejo especialmente para la ejecución presupuestaria, y porque ante la posición que ha adoptado la Concertación de reclamar el cupo para uno de los suyos, la economista sería expuesta.
Idoneidad y compensaciones
En este escenario, el senador Hernán Larraín (UDI), asegura que si bien “sería ideal una mujer porque es un Consejo que parece el Club de Toby, al final del día se tiene que buscar a la mejor gente”.
En esa línea, José García Ruminot (RN), afirma que “en la búsqueda de una persona de consenso no hay ningun ánimo de que sólo sea un varón, pero son pocas las mujeres con los pergaminos y que además logre el consenso necesario”.
En la Concertación, que tiene la mayoría en el Senado para inclinar la balanza, anticipan que si bien cuentan con cartas femeninas para el Consejo del Central y se apresuran a nombrar a María Eugenia Wagner (DC) y María Olivia Recart, ambas ex subsecretarias de Hacienda, además de reconocer las competencias de Andrea Repetto y Andrea Tokman, también admiten la omisión que cometieron en el tema a la hora de buscar una carta. Así las cosas, la nómina con los eventuales candidatos que postula la falange está compuesta sólo por economistas-hombres.
De ahí que mientras el senador Camilo Escalona (PS) dice que “en la Concertación han habido muchas mujeres que han tenido responsabilidades económicas, así que puede ser una mujer”, su colega Ricardo Lagos Weber (PPD) destaca que “el criterio fundamental es que sean personas idóneas técnicamente”.
Los senadores DC, Andrés Zaldívar y Hosaín Sabag, en tanto, insisten que lo importante es respetar el cupo y mantener los equilibrios.
En medio de este escenario y ante la falta de un acuerdo en una carta de consenso, en ambos sectores no se descarta que la fórmula para destrabar la nominacion del consejero sea parte de un paquete de leyes, con determinadas compensaciones que que estarían por definirse.