Cuando faltan 33 días para que los votantes peruanos vuelvan a las urnas para elegir al próximo presidente del país, los sondeos más recientes aún demuestran un empate técnico entre los candidatos que superaron la primera vuelta.
El más reciente de los estudios realizado por GFK, muestra, por primera vez, una ventaja leve de Pedro Pablo Kuczynski (de Peruanos por el Kambio) sobre la ganadora de la primera ronda, Keiko Fujimori (Fuerza Popular). La diferencia, sin embargo, es demasiado estrecha como para apurar una conclusión: en la encuesta, la hija de Alberto Fujimori alcanza un 42,6% de las preferencias, mientras que su contendor logra 43,1%.
Se trata de la primera encuesta publicada por GFK tras las elecciones del 10 de abril, en las que Fujimori obtuvo el 39,85% de las preferencias, dejando en segundo lugar a PPK, con 21,01% de los votos válidamente emitidos.
Según el estudio, que tiene una confiabilidad del 95,5%, Kuczynski tiene a su favor una intención de voto mayor en la capital del país, Lima (donde 49,6% de los encuestados lo apoyan, versus 41,7% que respalda a Fujimori), y en las zonas urbanas en general (donde recibe 46,4% de los eventuales votos versus 41,2% de su contendora).
La campaña del ex ministro de Economía de la nación logra, además, aglutinar a quienes apoyaron a otros candidatos en la primera vuelta de la carrera presidencial. Entre los seguidores de Verónika Mendoza (quien obtuvo el tercer lugar), Kuzcynski recibe un apoyo de 53,7%, por sobre 14% de los votantes de Keiko Fujimori. El escenario es similar entre quienes respaldaron a Alfredo Barnechea, Alan García o Gregorio Santos.
Por su parte, los sondeos de la consultora Ipsos también muestran una diferencia leve entre ambos candidatos, y, al igual que GFK, el escenario favorece a Kuczynski.
Aunque los dos aspirantes representan la centro derecha, los analistas estiman que el candidato de PPK genera menos anticuerpos que su rival. A esta última, puede jugarle en contra la vinculación con su padre, el ex presidente y dictador Alberto Fujimori, quien cumple sentencia por violaciones a los derechos humanos y quien hace dos semanas recurrió al Tribunal Constitucional para pedir que se anule el juicio en su contra.
El factor Kenji
Keiko no es la única de la familia Fujimori con aspiraciones presidenciales. Su hermano menor, Kenji, ya declaró a la prensa su intención de participar en las elecciones de 2018, en caso de que su hermana no lograra vencer en esta carrera.
Sus declaraciones no cayeron bien en Fuerza Popular. Así lo dejó entrever la propia Keiko Fujimori, quien llamó a una conferencia de prensa y leyó un comunicado público, en el cual manifestó que “aquí no hay espacio para posiciones personalistas”.
Además de la carrera presidencial, a ambos hermanos los divide la opinión sobre el futuro de su padre. Mientras Keiko ha negado reiteradamente la posibilidad de concederle un indulto, Kenji se ha mostrado abierto a esa posibilidad.
Disputas en el Kambio
El comando de Peruanos por el Kambio también ha visto enfrentamientos internos. El secretario general del partido y congresista electo Salvador Heresi ha tenido roces públicos con el jefe de campaña, Martín Vizcarra, luego de que este último dijera ante periodistas que Heresi no es vocero del partido. Pero el parlamentario manifestó a medios que Vizcarra “no puede desautorizarme”. Según el medio peruano El Comercio, el legislador también criticó que existe “una predisposición” a poner como “protagonistas” a los ex ministros del gobierno de Alejandro Toledo (2001-2006). “Peruanos por el Kambio no es el patio trasero de los ex peruposibilistas”, dijo, y cuestionó la decisión del jefe de campaña de nombrarlos portavoces políticos.
Las tensiones obligaron a que el candidato saliera ayer a zanjar la disputa, respaldando a su jefe de campaña. “Yo apoyo a Martín Vizcarra, yo lo puse ahí para que dirija la campaña y le pedí que la dirija una vez que entrábamos a segunda”, declaró Kuczynski a la televisión local.
Consultado sobre las pugnas internas sostuvo que “siempre hay bulla, sobre todo en un partido nuevo”. “No somos como un coro en la catedral, pero sí funcionamos y nos reunimos y obviamente a veces hay tensiones y lamentablemente han pasado”, añadió.
Kuczynski retomó ayer sus actividades de campaña en Lima tras un breve viaje a EEUU, lo que generó rumores de problema con su salud que descartó como parte de “campaña sucia”.
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