Señora Directora:
El Chile post pandemia será más pobre (el crecimiento en 2020 será negativo) y estará más endeudado. Y cuando salgamos de la crisis sanitaria aun enfrentaremos una crisis hídrica. Todo esto en año de elecciones y en medio de un proceso de importantes cambios políticos iniciado post 18-O, que incluye la eventual redacción de una nueva Constitución.
La solidez de las instituciones y la calidad de las políticas de un país son importantes determinantes de su desarrollo en el largo plazo y aunque Chile lidera los rankings en América Latina, no es Suiza.
Cuando se discuten propuestas para aumentar el gasto y la deuda pública, el llamado del gobierno para alcanzar un acuerdo nacional es crucial: debemos dar señales de seriedad robusteciendo nuestra institucionalidad macroeconómica. Deben fortalecerse la regla fiscal y la autonomía y poder del Consejo Fiscal Autónomo, y protegerse la autonomía del Banco Central. El poder legislativo no debe ceder a la tentación de demandas populistas con fines cortoplacistas, las que suelen multiplicarse en períodos de elecciones.
Porque Chile no es Suiza y no queremos parecernos a Argentina, necesitamos actuar con mucha responsabilidad y altura de miras.
Leonardo Hernández
Facultad de Economía y Administración UC, Clapes UC