Por Cristián Torres Erpel
Los decanos de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Manuel Agosin; Francisco Rosende, de Economía y Administración de la Pontificia Universidad Católica; Hugo Lavados, de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián; Rodrigo Castro, de Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo, analizaron para DF, el escenario externo y de qué forma podría impactar a Chile; las políticas internas que está desarrollando el gobierno y el Banco Central con miras al crecimiento y la TPM; así como sus puntos de vista sobre la educación, todas materias en las que más de uno tiene una opinión diferente.
Manuel Agosin
Rodrigo Castro
Francisco Rosende
Hugo Lavados
Escenario internacional: un problema esencialmente político
Alta volatilidad han mostrado las bolsas en los últimos días y la crisis en Europa y EEUU sigue en alerta y con altas probabilidades de agravarse. Según Hugo Lavados, en este escenario el principal problema es político. “Esto está derivando en una profundización de los problemas lo que podría gatillar una crisis (...) que se ve agudizado por una falta de acción política”. La solución, plantea, es la disminución “ordenada” del monto de pagos que debe hacer Grecia. “En el mediano plazo, dentro de los pilares que se mencionan las políticas para salir de esta situación son una consolidación de la política fiscal y una referencia puntual al sistema financiero”.
En la misma línea está Manuel Agosin, que coincide con que la dificultad de este problema radica en decisiones políticas. “Habría que hacer un default ordenado de Grecia, que no puede pagar las cuentas, y Europa debiera ponerse detrás de una cesación de pagos ordenada” afirma. A su juicio, EEUU va a tener un problema fiscal mayor en el futuro. “Hoy tiene una deuda del 90% del PIB, pero todo el mundo quiere comprarla, los papeles de EEUU están a tasa de interés que son bajísimas y puede permitirse el lujo de emitir deuda sin ningun problema”. Para Rodrigo Castro este es un escenario “muy delicado” no obstante, afirma que “las proyecciones de crecimiento para Europa y EEUU son optimistas. Los riesgos definitivamente, son a la baja”. Mientras que Francisco Rosende plantea que el hecho complejo se está evidenciando en las dificultades que tiene Europa para mantener cohesionada la zona euro. “Estos temores contaminan en primera línea la situación del sistema financiero de los países miembros, lo que transmite una cierta inquetud al resto de la economía mundial”, concluye.
Apuestas para educación: más regulación y mejor calidad
El debate sobre el sistema educacional, que conocen de cerca, no quedó al margen del análisis.
A juicio de Hugo Lavados, hablar de educación gratuita resulta “inequitativo”. “Un porcentaje más alto proporcionalmente, va al 20% superior porque la participación de los jovenes de ingresos más altos es más de 3 veces superior a la participación del 20% o 30% más bajo. La gratuidad es un error político y económico porque termina favorenciendo más a un grupo que puede pagar”, explica.
El ex ministro de Economía del gobierno de Bachelet reconoce “que nadie previó que la demanda social por educación superior iba a ser tan grande”. Y realiza una auto-crítica: “Creo que hicimos poco en regulación de algunos aspectos del sistema educacional. Así sostiene que “con regulaciones adecuadas, el lucro no es el centro del problema. El mercado siempre existe, el tema es como se regula. Hay que regular la educación en todas sus etapas”.
Para Agosin el tema radica en la calidad. “Los índices de cobertura son bastante buenos, pero la calidad es bastante mala, los programas de estudio hay que revisarlos todos, hay que hacer un esfuerzo gigantesco en educación, básica y media”. Sobre el lucro señala que “en un economía de mercado la utilidad al final del día, es importante; ahora, se debe observar que no hay ninguna universidad de calidad en el mundo que sea con fines de lucro”. Francisco Rosende señala que se debe apuntar a una educacion universitaria de calidad y focalizar. “El gobierno tiene ciertamente un rol en el fortalecimiento del sistema educacional, pero particularmente, en ayudar a que cualquier joven talentoso no quede fuera del sistema por falta de recursos”.
“Mesura” en reforma tributaria y presupuesto
La necesidad de mayores recursos ha sido objeto de análisis durante los últimos meses. A juicio de Hugo Lavados, “en el mediano plazo, una vez que pasen estos nubarrones, en Chile va a ser necesaria una reforma tributaria”. No obstante, advierte que “no debe haber reforma para financiar los $ 4.000 millones (de la educación) porque estos dineros no son anuales”. A su juicio, se debe ser equilibrado y analizar qué programas que se implementaron durante la Concertación, no fueron eficientes y ahí optimizar recursos. En materia de Presupuesto, advierte que este no debe ser “tan amarrado” y que debiera contemplar opciones para tener un incremento “de ser necesario”.
En tanto, Manuel Agosin afirma que en materia presupuestaria “va a venir un aumento del gasto que creo que ya se está negociando de entre 4,5% y 5%”. Agrega que la reforma tributaria es una opción cierta, no obstante, la coyuntura actual la obstaculiza.
De igual forma, Francisco Rosende plantea que en el próximo erario se debe ser “mesurado”. “No creo que se esté preparando para gastar más (...) no hay margen de instrumentalizar este tipo de estimaciones, tampoco me parecen que sean estimaciones”. Sobre la reforma tributaria señala que “siempre un país debe preguntarse si el sistema tributario que tiene es eficiente, la pregunta es ¿eficiente para qué?”. Según Rosende, debe ser eficiente para crecer, para generar empleo, para crear progreso, generar los recursos y para hacer más política social. “Esta es una pregunta de orden general, tenemos la estructura tributaria adecuada o no”.
Y agrega: “Es una discusión distinta, se visualizan problemas y se dice que hay gastar más, por lo tanto, hay que subir impuestos; ni siquiera tenemos muy claro cómo, ni dónde hay que gastar y ya estamos hablando de subir impuestos”.
Dispar opinión sobre el futuro de la economía local
Con respecto a la perspectiva de crecimiento y como debería evolucionar la Tasa de Política Monetaria (TPM) durante lo que queda del año y la proyección para siguiente ejercicio, los decanos coinciden en que sí habrá un efecto, sin embargo, tienen diferencias a nivel de las consecuencias que esto tendría.
Para Rodrigo Castro, la economía se desacelerará “pero eso no implica tasas negativas, solo menores a las presupuestadas”.
Por su parte, Hugo Lavados, estima que “este año vamos a estar más cerca del 6% que del 6,5% y el próximo año vamos a estar en 4,5%, con un escenario externo que está extremadamente volátil”.
“La situación no es que no vaya a golpear, ya nos está golpeando”, agrega Lavados, quien cree que no llegaremos a la meta del 6% como promedio de los cuatro años de administración Piñera. “Este planteamiento es un autogol del gobierno”.
A juicio de Manuel Agosin, en 2011 estaremos sobre el 6%, aunque en los últimos meses la tasa de crecimiento caiga. “Aunque el ministro diga que estamos bien y que no estamos inmunes, pero que estamos bien defendidos, creo que estábamos mejor defendidos el año 2008, porque teníamos un fondo soberano más grande”.
“La meta del 6% de promedio durante los cuatro años de gobierno, es una promesa que no se puede cumplir. Es un deseo más que una promesa”, agregó el decano de la FEN.
Para Francisco Rosende, el tema no es tan complicado como se plantea. “Yo no visualizo para el año próximo un cuadro de particular estrés en la economía chilena, a la luz de lo que es nuestra fortaleza hoy financiera; no creo que más allá de estas turbulencias que son de alguna forma, normales en este tipo de situaciones, vaya a ser especialmente dramático”, afirmó el decano de la U. Católica.