El déficit de Brasil en sus cuentas corrientes con el exterior llegará a unos US$ 49.000 millones este año y crecerá en 2011 hasta los US$ 64.000 millones de dólares, según proyecciones divulgadas hoy por el Banco Central.
En los dos casos, la diferencia entre los recursos que Brasil envía al exterior por la compra de productos y servicios y los que recibe de los otros países superará los US$ 33.400 millones de 1998, hasta ahora el mayor déficit en cuenta corriente del país.
En un informe divulgado hoy, el Banco Central (BC) mantuvo su previsión para el déficit de este año pero elevó desde US$ 60.000 hasta US$ 64.000 millones la de 2011.
Según el BC, el déficit alcanzará ese récord en 2011 porque la proyección del saldo negativo de la cuenta de servicios y renta, en la que se registran las remesas de lucros y dividendos, los pagos por intereses y los gastos de los brasileños en el exterior, subió de US$ 75.000 a US$ 78.000 millones.
Como contrapartida, el superávit en la cuenta comercial previsto para 2011 será de sólo US$ 11.000 millones.
El déficit en cuenta corriente es uno de los principales desafíos de Brasil y el Gobierno se esfuerza para que no afecte el crecimiento de la economía, que este año será del orden del 7,5% y el próximo de cerca del 4,5%.