Ricardo A. Pulgar
Antes que nada, mi novia es mexicana. Disculpen por mi falta de objetividad.
Mucho se ha escrito acerca de la decisión del Presidente de México, Sr. Enrique Peña Nieto, de asistir a la cumbre de la APEC en China en medio de la crisis originada por las recientes desapariciones en el Estado de Guerrero. No lo juzgaré, Sr. Peña Nieto, pero por sus actos pudimos ver lo que usted priorizó y lo que no.
El caso de los 43 estudiantes desaparecidos puede ser hasta beneficioso para usted, Sr. Peña Nieto. Su autor intelectual y alcalde de Iguala, Sr. José Luis Abarca, pertenece al izquierdista PRD. Una izquierda deteriorada restauraría al oficialista PRI como partido hegemónico. Los movimientos de protesta podrían captar votos en las próximas elecciones, pero eso es muy poco probable.
Es más, creo que los mexicanos votarán con sus bolsillos.
Veamos algunas cifras. Varios organismos multilaterales (FMI, Banco Mundial, OCDE) estiman que la tasa de crecimiento de la economía mexicana será un 2,3% para 2014 y un 3,5% para 2015. Por otra parte, las instituciones mencionadas pronostican que el desempleo caerá el próximo año de un 4,75% a un 4,5%. En cuanto a la inversión, ésta subiría levemente del 21,9% al 22,3% del PIB.
Para un "estado fallido", éste es un desempeño sobresaliente.
¿Quieren más? Lo ocurrido en México no ha afectado su riesgo país. El rendimiento del bono del estado mexicano a diez años ha caído sólo 11 puntos base este mes hasta el 3,24%, esto es, 100 puntos base por encima del rendimiento del bono a diez años de la tesorería norteamericana. Por su parte, el índice IPC de la bolsa mexicana ha subido un 2,54% durante este año.
¿Esto es bueno? ¿Es malo? Depende. Si asumimos que los precios de los activos mexicanos reflejan toda la información pública disponible, debemos concluir que esas desapariciones en México no fueron una novedad para los inversionistas. De hecho, los mercados internacionales actúan como si "esas cosas pasan a menudo en ese país"
En breve, México está disfrutando de su mala reputación.
Y eso es muy triste.