Economía mundial contrajo la “fiebre del oro”
La incertidumbre disparó el precios del oro a máximos históricos. Pero la EIU cree que hay una burbuja en el metal. Y si las malas noticias pasan podría reventar.
Por: Equipo DF
Publicado: Viernes 22 de julio de 2011 a las 05:00 hrs.
El 18 de julio el precio del oro se elevó por primera vez por sobre los US$ 1.600 por onza troyana, continuando una sólida alza que comenzó hace una década y se aceleró luego de la crisis financiera global. En este período de extrema incertidumbre, el estatus del oro como un refugio contra los riesgos en la economía global lo ha convertido en uno de los activos con mejor desempeño en el mundo. Pero una burbuja se puede desarrollar incluso si un activo es visto como la personificación de la seguridad, y esto parece sospechosamente una burbuja. Irónicamente, se necesitarían buenas noticias para hacer estallar esta burbuja.
No hay nada especial sobre la naturaleza del oro que lo haga un activo seguro. Si no fuera por su papel como tal, el oro se comportaría como la mayoría de los commodities, elevando su valor durante tiempos de bonanza económica, cuando la demanda por su uso industrial se incrementa, y viceversa. Pero las percepciones en los mercados financieros con frecuencia son “autoproféticas”, y nadie discute que en los últimos años, el oro se ha desempeñado extremadamente bien debido a que la economía global lo ha hecho extremadamente mal.
Desde que colapsó Lehman Brothers el 15 de septiembre de 2008, el precio del oro se ha más que duplicado. La demanda de los inversionistas se elevó de 692 toneladas en 1997 a 1.200 toneladas en 2008. En 2010 los inversionistas absorbieron 1.487 toneladas. La profunda recesión ha impulsado las tasas de ahorro en el mundo desarrollado, y con una enorme incertidumbre aún dominando, ese dinero ha sido puesto en los activos más confiables. El rendimiento de los bonos a diez años del Tesoro de EEUU se sitúa a sólo 2,9%. Ha habido períodos de aumento de confianza en los últimos tres años, como a comienzos de 2011, cuando los inversionistas llevaron los rendimientos del Tesoro de EEUU a diez años a 3,7%. Pero incluso eso estuvo por debajo del promedio de 4,8% en la década antes de la caída de Lehman. Los rendimientos de los bonos de los gobiernos alemán y japonés también está a un nivel históricamente bajo.
Se acaban los refugios
Aunque los activos de refugio seguro están desempeñándose sólidamente, el oro tiene la ventaja de que su valor no está atado a las finanzas de un gobierno. Los altos ratios de deuda pública en el período post crisis han dado razones para que los inversionistas reconsideren el estatus libre de riesgo que muchos bonos de gobierno gozaron con anterioridad, lo que, por extensión, ha hecho más popular al oro. Por ejemplo, los banco centrales, que tienden a invertir casi por completo en activos de muy bajo riesgo, durante el año pasado ajustaron sus portafolios a favor del oro y en contra de los bonos soberanos. Luego de ser vendedores netos de oro durante décadas, en 2010 pasaron a ser compradores netos y lo han seguido siendo en lo que va de 2011.
Durante las últimas semanas, las dudas sobre la solidez de los bonos soberanos podrían haber ayudado a impulsar al oro a un nuevo récord nominal. Lo más peligroso, es que el debate en Estados Unidos sobre el aumento del límite máximo de la deuda federal se mantiene extremadamente tenso. Si el Congreso no acuerda incrementar el tope de la deuda, el gobierno federal necesitará inmediatamente recortar su gasto en 44% o caer en default. Los mercados aún creen que se alcanzará un acuerdo (tal como lo cree la EIU), lo que explica por qué el rendimiento de los bonos del Tesoro aún es bajo. Sin embargo, la posibilidad de un default de Estados Unidos está aumentando cada día, y una estrategia para cubrir ese riesgo y una consiguiente caída en el dólar es comprar oro.
La crisis del euro también ha entrado en una nueva etapa. Los líderes de la Unión Europea se reunieron ayer para discutir otro paquete de rescate para Grecia, el que podría ser obstaculizado por la insistencia de que los bancos privados carguen con algunos de los costos de la reestructuración.
Un fracaso en los planes de rescate podrían provocar un default desordenado de Grecia. Portugal e Irlanda le seguirían rápidamente. Los perfiles de deuda de España e Italia no son tan alarmantes, pero corren el riesgo de una crisis de liquidez si cae la demanda por sus bonos. La eurozona no está actualmente equipada para rescatar a España e Italia. El gobierno italiano es el tercer mayor emisor de bonos del mundo, después de EEUU y Japón. Solía representar activos con bajo riesgo, pero ya no más. Los rendimientos de los bonos a diez años del gobierno italiano subieron a 6% el 18 de julio desde 5% de la semana anterior y 4% de hace un año.
A la espera de la corrección
Aunque las razones para el alza del precio del oro durante los últimos años son claras, creemos que se está acercando a su máximo. Esperamos que EEUU alcance un acuerdo y que su economía se acelere a partir del segundo semestre de este año, que los líderes europeos logren evitar un desastre en la eurozona, y que Japón se recupere después del desastre natural que lo afectó en marzo. Estos factores deberían impulsar la confianza de los inversionistas y presionar a la baja el precio del oro.
Esperamos que el precio del oro promedie US$ 1.390 la onza troyana en el cuarto trimestre de 2011 para caer después a US$ 1.000 la onza troyana para mediados de 2013. Pero este pronóstico está basado en nuestras suposiciones, y es importante recordar que la razón de por qué el oro es caro ahora es que los riesgos para esos supuestos son inusualmente altos.