El presidente del Banco
Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, anunció hoy
en Santiago que la institución estudia destinar unos US$ 460 millones para la reconstrucción de Chile, tras el terremoto que
sacudió el centro y sur del país el pasado 27 de febrero.
El anuncio se conoció en un comunicado, después de la reunión que
sostuvieron Moreno y el presidente de Chile Sebastián Piñera,
quien fue investido hoy, a quien manifestó su solidaridad por la
pérdida de vidas y la destrucción causadas por el terremoto.
En el encuentro, en el que también participó el nuevo ministro
de Hacienda, Felipe Larraín, el presidente del BID reafirmó
el apoyo de la entidad a las tareas de reconstrucción,
particularmente en las zonas más afectadas del país.
"El BID queda a disposición del Gobierno del presidente Sebastián
Piñera y de sus autoridades para ayudar a Chile a superar la
catástrofe en todos aquellos ámbitos en los que pudiéramos ser de
utilidad", subrayó Moreno, según el comunicado.
También, informó de la posibilidad de reorientar recursos ya
aprobados, pero aún no desembolsados, de proyectos que el BID
actualmente tiene en ejecución en Chile, que serían destinados a la
recuperación de las zonas afectadas por el sismo.
El BID también evalúa la posibilidad de aprobar recursos
adicionales para ponerlos a disposición de las autoridades chilenas.
Asimismo, Moreno anunció que una misión técnica del BID visitará
Chile el 22 de marzo para evaluar las necesidades del país.
Las áreas en las que el Banco Interamericano puede apoyar a Chile
incluyen la reconstrucción de ciudades costeras y el
restablecimiento de los servicios básicos en pequeños municipios,
entre otras.
Según Moreno, "Chile es un país reconocido como confiable y
sólido a nivel internacional. Por ello, sabrá ponerse de pie, pues
posee las reservas humanas, institucionales y económicas que
requiere la reconstrucción".
Por su parte, Jaime Sujoy, representante del BID en Chile,
explicó que hay disponibles unos US$ 260 millones no
desembolsados, correspondientes a créditos del BID para operaciones
actualmente en ejecución, y otros US$ 200 millones en préstamos para
proyectos en preparación, que pueden aprobarse rápidamente.