Lula insiste en mayor control de los gobiernos sobre el sistema financiero
"Es preciso que tenga control de los gobernantes para que no veamos a ningún país del mundo repetir los errores graves que fueron cometidos", dijo el mandatario.
- T+
- T-
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió hoy en la necesidad de que los gobiernos ejerzan un mayor control sobre el sistema financiero internacional, al comentar en su programa semanal de radio las conclusiones de la reciente Cumbre Iberoamericana.
"Todo el mundo está consciente de que es preciso cambiar el sistema financiero internacional, que es preciso que tenga control de los gobernantes para que no veamos a ningún país del mundo repetir los errores graves que fueron cometidos (...) sobre todo a partir del Gobierno norteamericano (EE.UU.) y de los gobiernos de los países europeos", dijo Lula.
En su programa radial "Desayuno con el presidente", Lula señaló que así "como son controlados otros segmentos de la sociedad", el sistema financiero también debe tener reglas.
La crisis financiera fue uno de los asuntos más debatidos en la Cumbre Iberoamericana celebrada la semana pasada en San Salvador.
El presidente subrayó además que los países latinoamericanos deben fortalecer el mercado interno y exportar más para atenuar los efectos de la crisis.
"América Latina venía con un proceso extraordinario de crecimiento. Todos los países venían creciendo. Obviamente que, con la crisis financiera, se reduce el flujo de crédito internacional, el flujo de las importaciones de los países ricos. Podemos tener problemas en los países periféricos", apuntó.
El gobernante también se refirió a la reunión de ministros de Finanzas y presidentes de los bancos centrales de los países del G-20, que se celebrará a partir del próximo viernes en Sao Paulo, una semana antes de la cumbre de mandatarios convocada para el 14 y 15 de este mes en Washington para tratar la crisis financiera.
Según Lula, las medidas que se tomen en esas reuniones posiblemente "no sean definitivas porque es necesario oír a todos los países del mundo" para que las decisiones "sean respetadas por todos, cumplidas por todos", expresó.
El presidente reiteró además que a pesar de la crisis financiera, su Gobierno mantendrá, como una "cuestión de honra", las obras del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), el programa bandera de su segundo mandato, que prevé inversiones por unos 250.000 millones de dólares hasta el 2010.