Horst Paulmann, hoy de 88 años, es sinónimo de Cencosud. Tanto, que pese a ya no tener un cargo formal en la compañía ni posición en el gobierno corporativo, desde que dejara oficialmente su directorio en abril del año pasado, esta semana viajó a Colombia para visitar algunas de las tiendas de la empresa. “Don Horst”, coinciden varios ex gerentes de la empresa y otros que siguen dentro, está de vuelta.
Y este es al menos un factor que explica el cambio que esta semana se produjo en el gobierno corporativo, cuando el martes por la tarde la firma anunció que Heike Paulmann, la hija del empresario y quien lo había sucedido en la presidencia, dejaba este cargo, aunque ella se mantiene en el directorio.
La elección de Julio Moura Neto en la presidencia, un alto ejecutivo de origen brasileño, ingeniero mecánico del Instituto Federal de Tecnología (ETH) de Zurich, con especialidad en ingeniería nuclear y con un MBA del MIT -que se ha desempeñado en cerca de una decena de compañías a nivel global, como Schindler Elevators, Masisa o Natura, por nombrar sólo algunas-, marca un hito.
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Es la primera vez que no está un Paulmann a la cabeza de Cencosud. Pero era el paso natural ante la vacancia. Y por una doble razón. Sin considerar a los miembros de la familia controladora, Julio Moura es el director más antiguo en la mesa de la compañía: se sumó a ella en agosto de 2011, invitado por el fundador, en el marco del interés de Paulmann de tener representantes provenientes de los países donde Cencosud ponía una bandera. Lo hizo también con el peruano Erasmo Wong, por ejemplo, en su momento, y ha sido una tradición no interrumpida.
Pero, además, por haber estrechado lazos incluso de amistad con el empresario de origen alemán, pese -dicen sus cercanos- a ser muy distintos en términos de aproximación en la gestión de los negocios. Paulmann es conocido por ser un empresario intuitivo, emocional, que se sale del molde, de las estructuras y de las agendas preestablecidas, si un negocio lo requiere. Y Moura, con una formación ejecutiva y cultural internacional, “by the book”, muy “europea”, estructurado y apegado a las normas, horarios y la planificación, comentan conocedores de su trayectoria.
Ese otro lado de la medalla en sus respectivos modos de ser, no impidió el estrecho lazo, algo que refrendó el propio Paulmann a Diario Financiero este jueves, cuando al referirse a la renuncia de su hija a la presidencia del conglomerado, dijo: “Yo como fundador de Cencosud estoy muy contento de que haya asumido Julio Moura. Es una persona con la cual he compartido mucho, porque yo llegaba de Argentina a Chile y él llegaba de Brasil, y nos encontrábamos cientos de veces en el Hotel Hyatt de aquel entonces. Así es que se puede decir que es un amigo y un conocido (…) Estoy muy agradecido”, sostuvo el empresario.
La frase del fundador de Cencosud, además, da cuenta de su involucramiento en la empresa, luego de un período silente.
El factor Videla
El fundador del conglomerado dueño de los supermercados Jumbo y varios otros negocios repartidos por Sudamérica y Estados Unidos siempre ha estado involucrado al 100% con la compañía que creó en la década de los ‘70. Siempre fue el primero en llegar y el último en irse de las oficinas de la empresa, emplazadas en el Mall Alto Las Condes. Los llamados a sus gerentes los domingos para citarlos a una reunión en su casa eran habituales.
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Al igual que las visitas a los supermercados para hablar con los trabajadores y clientes.
Para algunos era casi obsesivo: mientras se estaba construyendo el Costanera Center mandó a demoler varias losas porque no estaba conforme con el diseño, lo que significó semanas de retraso y millones de dólares en sobrecosto. Pero él quería hacer todo a su pinta. No obstante, a principios de 2021, se hizo público que tenía problemas de salud, y se desencadenó un paso histórico en el grupo de retail.
Primero, dejó la presidencia de la compañía, y luego el directorio, tras 45 años. Fue nombrado presidente honorario. Se dijo que daría un paso al costado y que dejaría todo en manos de sus hijos. Y así fue, en primera instancia: Heike Paulmann asumió la presidencia de la compañía secundada por el mayor de los hermanos, Manfred. El tercero, Peter, siempre apoyando desde afuera. Su retoño, Hans, aún está en el colegio.
Pero HP (como lo llaman en Cencosud) volvió hace ya varios meses a involucrarse en la compañía, desde fuera, con la mirada de un fundador. “Hemos tenido un periodo de problemas por nuestro ex gerente general y a esto hay que darle un corte final, y por eso hicimos algunos cambios. Era necesario. Yo le agradezco muchísimo a mi hija Heike, ella tiene muchas cosas que hacer en forma privada y estamos todos contentos”, añadió esta semana Paulmann al DF.
Varios testigos que piden reserva de su identidad relatan que Paulmann siguió muy de cerca el bullado episodio generado tras la sanción en contra del ex gerente general de la firma, el argentino Matías Videla, por uso de información privilegiada.
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Precisan que el empresario estaba enfadado desde hace varios meses con el hoy exgerente, luego de que éste vendiera acciones de Cencosud en abril de este año. Consideró casi como una traición que mientras el mercado celebraba los buenos resultados de la compañía, con buenas perspectivas y recomendaciones de compra, su CEO se deshiciera de algunas de sus acciones.
Tras este episodio, Paulmann cambió su actitud. Un exgerente de la firma revela que hace meses -antes de la acusacion de información privilegiada-, un domingo, el empresario invitó a comer a su casa a tres altos gerentes del conglomerado y en la lista no figuró Videla.
Pero el argentino contaba con el respaldo de la presidenta de la compañía en ese entonces, Heike, quien mantuvo a Videla -con el respaldo del resto del directorio-, por dos semanas luego de la sanción por uso de información privilegiada de la CMF, caso que está apelado por el exejecutivo y que aún se ventila en tribunales.
Para Don Horst, esto era inadmisible, misma visión que tenían las AFP (accionistas de la empresa) y varios representantes gremiales, que pedían la renuncia del gerente. Ahí, dicen conocedores, se habría generado una fricción entre padre e hija. Videla renunció, pero el caso -el más crítico a nivel reputacional que ha enfrentado Cencosud en su historia- generó una distancia en el clan. Por un lado, Horst y sus hijos Manfred y Peter, y por el otro, Heike.
“HP decidió que no siguiese en la presidencia”, afirman dos altas fuentes. “Estaba muy molesto con todo lo que pasó”, añaden.
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Desde el entorno de Heike, señalan que ella nunca buscó ser la presidenta de Cencosud. Recuerdan que tomó el cargo de manera interina, ante la necesidad que se produjo, y que después decidió aceptarlo de forma permanente como representante de la familia, que es dueña del 55% de la empresa, acciones que valen casi US$ 3 mil millones. Pero comandar un buque que requiere una dedicación 24/7, sumado al arduo caso Videla, generaron un desgaste natural en la empresaria, sobre todo por este duro episodio. “Para ella fue puro costo y le tocó muy duro”, dicen en su entorno.
De paso, el episodio hizo que Cencosud siga en la búsqueda de su CEO, con la asesoría de la firma Korn Ferry, si bien de manera interina esta designado Renato Gutiérrez en el cargo.
¿Y Manfred Paulmann?
En medio de este episodio, Paulmann habría analizado proponer la nominación a presidente de una persona externa de la empresa, lo que -coinciden altas fuentes consultados- aún no estaría totalmente descartado.
En esa línea, un escenario abierto es si Julio Moura será una figura permanente o transicional, pues no está descartado que Manfred Paulmann asuma la presidencia del grupo en los próximos meses, algo que siempre estuvo en el diseño original y además porque en la empresa hermana, Cencosud Shopping, que preside, lo ha hecho bien. “Es probable que la designación de Julio sea por un plazo determinado y posteriormente sea el tiempo de Manfred. Una vez que convenga en detalle los límites con su padre en la gestión de la empresa”, dice un conocedor.
Legalmente, apuntan entendidos, en abril no es necesaria una renovación del directorio, puesto que Heike Paulmann se mantiene en la mesa. Pero podría ser, de todos modos, el momento del regreso de otro Paulmann a la cabeza del gigante del retail.
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