El próximo 8 de enero es la fecha tentativa que el gobierno maneja para presentar el proyecto de ley que busca regular a los siete casinos municipales, que pasarán a ser fiscalizados por la Superintendencia de Casinos de juegos (SCJ).
Todo esto se produce porque el 31 de diciembre de 2 015 los siete casinos municipales existentes en el país deberán despedirse del antiguo sistema legal que los rige y quedar bajo el paraguas de la SJC, organismo que hoy fiscaliza a 17 salas de juego, licitadas conforme a la normativa vigente desde 2005.
El proceso
La iniciativa legal entregará en forma indefinida la licencia para que permanezcan en las mismas comunas donde operan en la actualidad. Es decir, las plazas de casinos se mantendrán en Arica, Iquique, Coquimbo, Viña del Mar, Pucón, Puerto Varas, y Puerto Natales. Otro de los puntos en discusión es la forma en que se repartirían los ingresos que generan dichos establecimientos.
En la industria de juegos hoy existen dos tipos de permisos: licencias municipales y los permisos de operación de casinos regulados por la SCJ, y la principal diferencia radica en la recaudación. Por eso, el acuerdo establece que, tal como lo hacen los casinos bajo la supervisión de la SCJ, la concesionaria deberá pagar un impuesto específico con una tasa única de 20%, distribuidos en 10% para el municipio donde se ubica el casino y 10% para el gobierno regional.
Si bien los municipios validaron este punto, se incluirá dentro del proyecto que la concesionaria que se adjudique la operación deberá asegurar al municipio los recursos que perciben hoy por este concepto.