Ministro británico: crisis empobrecerá a 90 millones de personas más
Douglas Alexander explicó que ese hecho retrasará en al menos tres años la consecución de los Objetivos del Milenio de la ONU.
La crisis financiera internacional
empobrecerá a 90 millones de personas más para finales del año
próximo, advirtió hoy el ministro británico de Desarrollo
Internacional, Douglas Alexander.
Alexander explicó que ese hecho retrasará en al menos tres
años la consecución de los Objetivos del Milenio de la ONU, con los
que se aspiraba a erradicar la pobreza mundial para el 2015.
Bajo el título "Eliminando la pobreza, construyendo un futuro
común", varios políticos, científicos, cooperantes y celebridades
participan en una cumbre en la que se analizan los efectos de la
crisis crediticia en los países pobres, con el fin de elaborar un
plan para presentar en la próxima reunión del G20 (países más ricos
y economías emergentes).
Al inaugurar la jornada, el primer ministro británico, Gordon
Brown, afirmó que la drástica caída del comercio, la producción y la
inversión "plantean una verdadera amenaza a los años de progreso
para sacar a la gente de la pobreza".
Alexander señaló que cada semana millones de personas se ven
forzadas a vivir con menos de 1 euro, y
pidió a los países una "acción radical" para poner en marcha una red
de apoyo para el futuro.
El ministro quiere proponer al G20, que se reunirá en Londres el
próximo 2 de abril, la creación de un Fondo Social de Respuesta
Rápida, que, bajo el paraguas del Banco Mundial, destinará dinero a
paliar las necesidades básicas de los grupos más vulnerables.
"Es correcto que pongamos en marcha apoyo para salvar las vidas
de los más afectados por la crisis", declaró Alexander.
Se calcula que a raíz de la crisis la inversión extranjera
directa en países pobres se reducirá este año un 80%,
desde US$ 929 millones en el 2007, mientras que el dinero
enviado por emigrantes a sus países descenderá en unos US$ 20.000
millones el año próximo.
El ministro británico aseguró que el Reino Unido mantendrá además
su promesa de destinar un 0,7% del PIB a ayuda humanitaria
para el 2013, e invitó a otras naciones a hacer lo mismo.
También expresó el compromiso de cambiar la manera cómo se
distribuye la ayuda para acelerar la recuperación, y adelantó que,
en unos meses, su Gobierno presentará una propuesta de reforma para,
mejorar el comercio, abordar el cambio climático y detener el
conflicto entre Estados.