Antofagasta Minerals festejó la decisión del Gobierno de Donald Trump de dejar en cero la tarifa aduanera al cobre refinado. Pero más allá del impacto puntual en el brazo minero del grupo Luksic, el CEO de la compañía, Iván Arriagada, enfatiza que tal política beneficia a todos los productores de mineral rojo, porque refuerza el carácter estratégico del metal, su rol clave en la industrialización y en la economía del futuro.
Debido a que los gravámenes pesaban como una espada de Damocles sobre los productores cupríferos -con la amenaza latente de un arancel del 50% a todo el cobre, por parte de Trump- muchos importadores en Estados Unidos adelantaron las compras del mineral para prepararse ante un eventual mayor precio.
Aquello implicó que empresas mineras chilenas aumentaran sus envíos, lo que hizo subir las exportaciones desde Chile al país del norte en 123% en el primer semestre del año.
El grupo Luksic no se quedó atrás. La minera Zaldívar pasó de no vender nada a EEUU a exportar US$ 148 millones a junio de 2025. En el caso de Centinela, se pasó de US$ 4 millones en el primer semestre de 2024 a US$ 120 millones en igual lapso de 2025.
En Twin Metals “hay una tremenda oportunidad ahí de seguir desarrollando el proyecto, pero en una perspectiva de muy a largo plazo”.
- ¿Cómo reciben la exención al cobre refinado en el grupo?
- Hemos tenido una buena noticia. Yo creo que es importante porque refuerza que el cobre es un metal estratégico para la seguridad nacional, para el desarrollo de nuevas tecnologías, para las economías más importantes y que Chile es un buen socio proveedor y, por lo tanto, esas son muy buenas noticias.
- ¿Qué cree que pasó, considerando que Trump amenazó con arancel de 50%?
- Primó el realismo. Creo que lo que se hizo tiene sentido, debido a que EEUU es un importador neto de cobre refinado y, por lo tanto, esto de alguna manera permite que esa demanda se siga abasteciendo, lo que es tan importante para desarrollar la industrialización de EEUU, que es la política pública que el Gobierno estadounidense ha estado impulsando.
- ¿Esto cambia el escenario para Twin Metals, pensando que los aranceles podrían haber impulsado más rápido todavía el proyecto?
- No. Nosotros siempre hemos dicho que lo miramos como un proyecto de largo plazo. Creemos que hay una tremenda oportunidad ahí de seguir desarrollando el proyecto, pero en una perspectiva de muy a largo plazo y por lo tanto, no, no cambia la perspectiva respecto de eso.
Pero lo importante hoy día es que la principal industria que tiene Chile, que es el motor de la economía, ha quedado exenta de aranceles y eso es importante. Si bien el consumo de la economía estadounidense no es muy significativo, es menos del 10% (de los envíos totales del cobre de Chile), sí es importante que se refuerce que el cobre es un metal crítico, que Chile es un socio comercial confiable. Creo que eso es muy importante y eso ha salido fortalecido en esta decisión.
- Antofagasta igual había aprovechado la previa de los aranceles y había aumentado sus envíos a Estados Unidos…
- Nuestros principales mercados están más bien en Asia. Los principales mercados de destino de nuestras exportaciones son Japón, Corea del Sur y también China. Las ventas al mercado estadounidense son menos del 10% de (las ventas totales de) Antofagasta en 2024. Por lo tanto, no hicimos ajustes importantes en nuestros flujos de comercio.
- Considerando que igual va a haber un arancel, pero a semielaborados y derivados. ¿Qué irrupciones en el mercado podrían verse?
- Yo pienso que eso va probablemente a frenar las importaciones de semi fabricados que vienen de otros lugares distintos de Chile. Nosotros vamos a seguir exportando el cobre refinado, por lo tanto no, no veo que tenga mayor impacto.
Así que obviamente que en este momento hubo una acumulación de inventarios en Estados Unidos que va a reducirse para normalizar el consumo. Eso va a significar que transitoriamente pueden haber menos compras en ese mercado. Pero esos flujos de comercio van a estar orientados a los otros mercados. Va a haber un reacomodo. Pero, más allá de eso, esta es una buena noticia que tenemos que celebrar.