Salud

CLC: directorio desvincula de la gerencia general a estrecho colaborador de Alejandro Gil

Jerónimo García había sido clave en el círculo de hierro de los controladores de CLC y su sorpresiva salida deja un saldo de cuatro máximos ejecutivos en menos de tres años.

Por: Jorge Isla | Publicado: Lunes 25 de abril de 2022 a las 14:13 hrs.
  • T+
  • T-
Foto: Archivo
Foto: Archivo

Compartir

Sorpresa a nivel de todo el sector privado de salud causó ayer la decisión del directorio de Clínica Las Condes (CLC) de “acordar solicitar la renuncia” del actual gerente general Jerónimo García, medida que se hizo efectiva a partir de ayer. La instancia justificó esta determinación, adoptada en forma unánime, debido a la “necesidad de iniciar una nueva etapa en Clínica Las Condes, coherente con los nuevos desafíos que impuso la pandemia aún existente en el país”, según un hecho esencial enviado a la Comisión para el Mercado Financiero firmado por Alejandro Gil, presidente del directorio.

El principal representante del grupo Auguri -family office de la empresaria Cecilia Karlezi, accionista controladora de CLC- indicó que la remoción del ejecutivo tuvo lugar también ante la “necesidad de robustecer el gobierno corporativo, todo ello en el mejor interés de la sociedad y de todos sus accionistas”. Asimismo, informó que en reemplazo de García fue designado en carácter interino Ignacio Tapia, quien a la fecha era gerente de administración y finanzas de la clínica.

Las necesidades de “iniciar una nueva etapa coherente con los nuevos desafíos que impuso la pandemia” y “robustecer el gobierno corporativo” fueron los argumentos informados por CLC.

Alejandro Gil, Presidente del directorio de Clínica Las Condes. Jerónimo García, gerente general saliente de CLC.

Con la salida de Jerónimo García, CLC completa un total de cuatro gerentes generales salientes en un período inferior a los tres años.

El rol del exejecutivo

García había sido un estrecho colaborador de Alejandro Gil en la serie de conflictos que ha vivido esta institución desde 2019, marcados por el rechazo de los estamentos médicos a la reorganización de los estatutos impulsada por los controladores, seguido por despidos y renuncias de un importante número de profesionales, muchos de ellos de larga trayectoria y altas responsabilidades.

Asimismo, García jugó un rol clave en el manejo de la administración según los criterios de los controladores en medio de disputas con los accionistas minoritarios de CLC, los cuales incluyeron episodios marcados por duras críticas al manejo de Gil a nivel del gobierno corporativo y de la gestión médica.

Hitos de una difícil relación

En los años siguientes a su toma de control de la Clínica Las Condes en 2019, el directorio encabezado desde entonces por Alejandro Gil ha tenido una difícil relación con sus principales ejecutivos. Esta constante se hizo evidente primero con Jaime Hagel, gerente general asumido en reemplazo de Jaime Mañalich poco antes de la arremetida del grupo Auguri en la propiedad, y que poco después dejó el cargo en medio de cuestionamientos a su gestión. Posteriormente, CLC interpuso una querella en su contra por “administración desleal”, acusación de la cual fue absuelto por el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago en septiembre.

Hagel fue reemplazado por Andrés Illanes, quien desde su trayectoria como principal ejecutivo de la Clínica Dávila y el Hospital Clínico UC, asumió en enero de 2020. Pero, sorpresivamente renunció sólo tres meses después en medio de conflictos internos por atribuidos a desacuerdos en torno a las medidas de protección sanitaria a trabajadores de riesgo por la pandemia y la acogida de una solicitud de asociaciones de funcionarios en el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago. En ese momento, se indicó que ambas situaciones fueron determinantes en sus desencuentros con el presidente de la clínica.

A continuación se designó en la gerencia general a Fredy Jacial Ellis, quien tenía a su favor el hecho de haber sido director de Clínica Las Condes en períodos anteriores y gozar de la plena confianza del grupo controlador. Sin embargo, igualmente sólo alcanzó a estar tres meses en ese cargo, y si bien su salida en agosto de 2020 se dio en buenos términos -ya que en ese momento se indicó que continuaría apoyando “la gestión de la alta administración” y se mantendría como presidente del directorio de la filial de seguros, finalmente también fue querellado por CLC por “administración desleal”. Aquí el motivo principal de la acción legal fue la acusación a Jacial -en el marco de la pandemia- de haber aceptado pacientes Fonasa derivados por la Unidad de Gestión Centralizada de Casos del Ministerio de Salud por sobre el límite impuesto por la autoridad sanitaria, y por montos de pago sustancialmente inferiores a los que aplica en sus prestaciones.

En esta querella -donde se estableció un perjuicio atribuido a estas medidas en un monto de $ 8.500 millones-, CLC sufrió un revés en primera instancia en el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, y luego en Séptima Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago que la desestimó a principios de diciembre.

Tras la salida de Jacial -la designación recayó en el entonces gerente de Finanzas de CLC Jerónimo García Bacchiega, primero de forma interina y luego ratificado oficialmente en septiembre en 2020, convirtiéndose así en el cuarto gerente general de la institución privada de salud en menos de un año.

Lo más leído