Nicolás Vial C.
En forma silenciosa comenzó a funcionar el pasado martes el registro centralizado en contratos forward, un nuevo servicio del Depósito Central de Valores (DCV). Además de ser destacada como un valioso paso para el DCV por su gerente general, Fernando Yáñez, el lanzamiento de este sistema fue catalogado nada menos que como un hito por las dos industrias fnancieras que mueven más recursos en el país: la banca y las AFP.
A través de este registro, el DCV captura las operaciones de estos instrumentos financieros que bancos y AFP hacen en los sistemas que hoy están vigentes, además de poder concluir y hacer modificaciones a los contratos y elaborar un reporte diario a los reguladores sobre las operaciones realizadas.
La iniciativa surgió de las AFP, las que veían la necesidad de organizar este segmento en términos de orden y transparencia. “Es un proyecto que pedimos, solicitamos, golpeamos puertas para lograrlo”, dice el gerente general de la Asociación de AFP, Francisco Margozzini, para quien este nuevo servicio es un avance importante por la incidencia que tiene y la seguridad que entrega.
“Para nosotros es un hito más dentro del amplio espectro de desarrollo de las coberturas en el cual estamos involucrados como industria bancaria. La volatilidad de los mercados es ciertamente una realidad y el riesgo que conlleva no contribuye a que hayan más negocios… y ciertamente no contribuye a que los costos puedan bajar”, indicó el gerente generales de la Asociación de Bancos, Alejandro Alarcón.
Según los ejecutivos, el registro de forwards representa un aporte al desarrollo del mercado de derivados, principalmente por la automatización de los procesos y la seguridad que entrega la suscripción digital mediante firmas digitales avanzadas. “Los mercados mundiales están interesados en ser muy transparentes en todos los temas de derivados. Son contratos que a veces están fuera de los balances, no hay información consolidada de outstanding por parte de las instituciones, entonces esto permite tanto a los reguladores como a los participantes del mercado tener muchísima mayor información”, agregó Yáñez.
Entrada de más actores
Los derivados son un mercado financiero que en Chile está dando importantes pasos. Actualmente entre los bancos y las AFP se realizan alrededor de 70.000 contratos de forwards al año, una cantidad que según los ejecutivos podría ampliaRse debido al fuerte potencial que tiene este vehículo financiero.
“Las PYME en Chile son más de un millón de empresas que necesitan un apoyo de este tipo de instrumentos que son totalmente nuevos. Hay un espacio para alcanzar el medio millón o 400 mil, lo que es un salto enorme”, explica Alarcón.
Entre los nuevos actores que podrían entrar al registro a fines del primer semestre, se considera a las corredoras de bolsa, compañías de seguros, fondos mutuos, entre otros, los que al ya tener cuentas abiertas en el DCV pueden adoptar fácilmente el sistema.