La ministra francesa de Finanzas, Christine Lagarde, señaló
hoy la existencia de "fuerzas de resistencia" en las plazas
financieras de Nueva York y Londres frente a la voluntad de establecer una
regulación internacional en la cumbre del G20.
Lagarde señaló, en una conferencia de prensa, que en los
preparativos de la cumbre de esta semana en Estados Unidos "se
siente" que "un cierto número de plazas (financieras) están en
competencia", una situación que "es particularmente cierta" para
Wall Street y la City
de Londres.
Insistió en que "esta reunión es un verdadero
desafío" porque con el inicio de la recuperación económica en algunos
países, existe el riesgo de que se olviden los "efectos desastrosos"
de la crisis y "muchos" quieran volver a las prácticas anteriores que
la causaron.
Pero interrogada sobre la amenaza de Nicolas Sarkozy, de
abandonar la reunión si no se producen los avances esperados, se mostró
confiada y recordó que en la anterior cumbre del G20 de abril en Londres la voluntad
del presidente francés había tenido efectos sobre las decisiones para los
paraísos fiscales.
"Eso quiere decir que la política puede cambiar las
cosas", y que en Pittsburg "podemos cambiar las cosas",
argumentó.
La ministra indicó que su país va a utilizar tres
indicadores para evaluar el éxito de la cumbre, empezando por el consenso para
"limitar" el sistema de primas para los operadores de mercados, un
punto en el que admitió que se ha abandonado el objetivo de fijar
remuneraciones tope, un sistema que "no es particularmente efectivo".
No obstante, precisó que "seremos inflexibles"
sobre ciertos elementos para regular esas primas.