Wall Street terminó la última sesión del año con números
rojos, sin embargo, logró terminar el ejercicio con un incremento de 18,7%
acumulado, en un intento por dejar atrás un negro 2008 en el que el mercado bursátil
se vio fuertemente golpeado por la crisis financiera que azotó al mundo.
El índice Dow Jones de Industriales, que agrupa a algunas
las mayores empresas de Estados Unidos, retrocedió este 31 de diciembre 1,19%, hasta los 10.423,29 unidades.
En tanto, el mercado Nasdaq descendió 1,00%,
hasta las 1.115,21 unidades, mientras que el selectivo S&P 500 perdió 0,93%, finalizando en 2.269,93 enteros.
2009: retomando la confianza
La principal bolsa estadounidense llegó al último día de un
año marcado por la peor recesión que ha conocido la economía internacional
desde 1929.
"Wall Street goza de mejor salud. Su estado ha mejorado
de grave a estable, pero aún no está listo para dejar el hospital"
manifestó a Efe el analista jefe de Standard & Poor's, David Wyss, al
tiempo que señaló que si bien 2008 será recordado como el año del colapso del
sistema financiero, este que termina se rememorará como el de la crisis.
La Bolsa
de Nueva York recibió la entrada del presidente Barack Obama, el pasado 20 de
enero, con un descenso de 4% en el índice Dow Jones de Industriales y de más
del 5% en el S&P 500 y el Nasdaq, en medio de la inquietud en torno a la
situación de las principales entidades financieras estadounidenses y a la
incertidumbre en cuanto a la respuesta que daría el nuevo Gobierno a la crisis.
El cambio de Gobierno ocurría apenas un mes después de
conocerse que la economía estadounidense se hallaba en recesión desde diciembre
de 2007, lo que había llevado a la Reserva Federal a dejar el tipo de interés de
referencia en un nivel históricamente bajo entre 0 y 0,25%.
Pero las dudas sobre el efecto de las rebajas de tipos de
interés y de otras medidas de estímulo económico y del crédito en EE.UU. y
otros países desarrollados llevó a Wall Street y a otros mercados europeos y en
diversas regiones a tocar fondo en marzo.
El Dow cerró el día 9 de ese mes a 6.547,05 puntos, el nivel
más bajo desde mediados de abril de 1997 y los principales indicadores en las
bolsas de París, Fráncfort, Madrid, Londres, Tokio, Hong-Kong, Bombay o Sidney,
entre otras, registraron también en los inicios de marzo las cotas más bajas de
este año.
A mediados de junio los bancos JPMorgan Chase, Morgan
Stanley, Goldman Sachs y otras entidades financieras anunciaron que habían
devuelto más de US$ 68.000 millones que recibieron del Gobierno en plena crisis
financiera, además de pagar dividendos.
Un mes después Citigroup y Bank of America, dos de los más
afectados por la crisis financiera e hipotecaria, informaban de que incluso
habían cerrado el primer semestre del año con beneficios.
En adelante el repunte se dio a nivel generalizado luego de
que las perspectivas de recuperación para 2010 tomaran más fuerza, tanto en Estados
Unidos, como a nivel internacional.
Es cierto que no se ha declarado oficialmente la salida de
la recesión y el ánimo de los inversionistas está sustentado en una serie de
cifras que muestran que poco a poco la economía ha ido mejorando, pero mientras
estas condiciones se mantengan los mercados de renta variable continuarán con
su avance.