Economía y Política
Ex presidente Lagos postula nuevo “pacto social” para revisar sistema impositivo chileno
En el think tank ProyectAmerica, Ricardo Lagos Escobar debatió su propuesta “Chile 2030: siete desafíos estratégicos y un imperativo de equidad”.
Por: | Publicado: Miércoles 30 de marzo de 2011 a las 05:00 hrs.
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“Es indispensable pensar un nuevo pacto social”, dijo el ex presidente Ricardo Lagos al explicar la necesidad de revisar el sistema impositivo chileno para responder al desafío que tiene el país de mejorar la distribución del ingreso. La propuesta es una de las iniciativas incluidas en el documento “Chile 2030: Siete desafíos estratégicos y un imperativo de equidad”, elaborado por el ex mandatario y que ayer debatió junto a dirigentes de la Concertación, en la sede del think tank ProyectAmérica.
“Chile está en una etapa distinta de su desarrollo, por lo tanto hay que atreverse a dar un salto distinto (…). El tema de la distribución de ingreso, dado el nivel de crecimiento que estamos teniendo, va a ser cada vez más determinante para las respuestas sociales que el país necesita, es demasiada la evidencia empírica. Creo que es conveniente colocar el debate en estos términos”, precisó el ex jefe de Estado.
De ahí que, junto con recordar que en los gobiernos de la Concertación “en materia de distribución del ingreso hicimos todo lo que era viable hacer por la vía de focalizar el gasto (Chile Solidario)”, Lagos enfatizó que “si queremos mejorar la distribución del ingreso tenemos que ver la otra parte de la ecuación. Cómo mejorar la distribución del ingreso por la vía de cuando capto los ingresos, no cuando los gasto. Y capto quiere decir impuestos”.
Por ello relevó la importancia de un nuevo pacto social para impulsar “entre todos y en serio” una discusión que permita revisar “un sistema impositivo heredado de (Hernán) Büchi el año 84, en que Chile venía con la crisis del año 82 muy grande y por lo tanto se hizo un sistema tributario en donde lo importante era que las empresas invirtieran y no distribuyeran utilidades”, dijo.
País desarrollado
En el texto Lagos precisa que “no hay países desarrollados que tengan un nivel de presión tributaria sobre el producto del orden del 18%, como es el caso de Chile, o del 23% si se consideran otras contribuciones sociales de carácter provisional y/o peajes en las carreteras”.
Y señala “hay excepciones (...), pero la norma general es que la base tributaria sea la utilidad devengada y no la retirada. Chile tiene este peculiar sistema adoptado en virtud de las necesidades de 1984”, pero que “hoy, cuando tantos empresarios chilenos invierten en otros países en los que se tributa sobre utilidades devengadas y con impuestos muy superiores al 17% que se paga en Chile de forma permanente, es necesario meditar muy seriamente acerca de cómo encarar entre todos este tema, para evitar convertirlo en parte de la lucha política cotidiana”.
“Chile está en una etapa distinta de su desarrollo, por lo tanto hay que atreverse a dar un salto distinto (…). El tema de la distribución de ingreso, dado el nivel de crecimiento que estamos teniendo, va a ser cada vez más determinante para las respuestas sociales que el país necesita, es demasiada la evidencia empírica. Creo que es conveniente colocar el debate en estos términos”, precisó el ex jefe de Estado.
De ahí que, junto con recordar que en los gobiernos de la Concertación “en materia de distribución del ingreso hicimos todo lo que era viable hacer por la vía de focalizar el gasto (Chile Solidario)”, Lagos enfatizó que “si queremos mejorar la distribución del ingreso tenemos que ver la otra parte de la ecuación. Cómo mejorar la distribución del ingreso por la vía de cuando capto los ingresos, no cuando los gasto. Y capto quiere decir impuestos”.
Por ello relevó la importancia de un nuevo pacto social para impulsar “entre todos y en serio” una discusión que permita revisar “un sistema impositivo heredado de (Hernán) Büchi el año 84, en que Chile venía con la crisis del año 82 muy grande y por lo tanto se hizo un sistema tributario en donde lo importante era que las empresas invirtieran y no distribuyeran utilidades”, dijo.
País desarrollado
En el texto Lagos precisa que “no hay países desarrollados que tengan un nivel de presión tributaria sobre el producto del orden del 18%, como es el caso de Chile, o del 23% si se consideran otras contribuciones sociales de carácter provisional y/o peajes en las carreteras”.
Y señala “hay excepciones (...), pero la norma general es que la base tributaria sea la utilidad devengada y no la retirada. Chile tiene este peculiar sistema adoptado en virtud de las necesidades de 1984”, pero que “hoy, cuando tantos empresarios chilenos invierten en otros países en los que se tributa sobre utilidades devengadas y con impuestos muy superiores al 17% que se paga en Chile de forma permanente, es necesario meditar muy seriamente acerca de cómo encarar entre todos este tema, para evitar convertirlo en parte de la lucha política cotidiana”.