Tras reunirse por dos horas en el Comité Político en La Moneda, el Gobierno descartó, por el momento utilizar, el 2% constitucional para paliar el déficit económico que afecta al sistema de transporte capitalino.
De esta forma, se decidió respaldar y continuar con el lobby que viene realizando el ministro de Transporte, René Cortázar, a los senadores independientes para obtener los votos necesarios para aprobar el proyecto que permite el financiamiento permanente del Transantiago.
La iniciativa se encuentra en estos momentos en el Senado, luego que fuera aprobado en la Cámara de Diputados y se espera que a mediados de septiembre se vote en la Sala de la Cámara Alta.
El ministro secretario general de Gobierno, Francisco Vidal señaló que el Gobierno perseverará en el trámite legislativo, pese a que la "derecha nos niega los recursos en el Parlamento, y eso nos obliga a adquirir un crédito externo, al BID, pero no les gusta tampoco eso, entonces apelan al Tribunal Constitucional. O sea ni sal, ni agua, ni pimienta".
Vidal explicó además que la idea del Ejecutivo es "acelerar"
las negociaciones en el Parlamento y para eso el ministro Cortázar -quien no asistió al comité político-
se reunirá hoy y mañana con los senadores independientes,
para conseguir su respaldo.
La estrategia adoptada se enmarca en el nuevo escenario, tras filtrarse la resolución del Tribunal Constitucional (TC) que habría declarado inconstitucional el préstamo de US$ 400 millones al BID para financiar el Transantiago.
Se espera que en el transcurso del día, o a más tardar mañana, se conozcan finalmente los alcances y la decisión del TC en este tema. Es tarde se espera se reúnan los miembros del Tribunal.
Una de las alternativas que barajaba el Gobierno ante este escenario era recurrir al 2% del presupuesto que la Constitución autoriza para enfrentar "calamidades públicas", lo que por el momento se descartó.