El investigador del Programa Económico de Libertad y Desarrollo, Felipe
Silva, sostuvo que "es fundamental que existan mecanismos para que las personas
de baja empleabilidad aumenten su productividad, pero no tenemos por qué
financiarlo con impuestos al trabajo que recaen precisamente sobre ellos", al
referirse al ingreso a la Cámara de Diputados de un proyecto que modifica el
seguro de desempleo.
Las primeras reacciones al proyecto, se han dividido entre algunos que
lamentan la ausencia de alguna modificación al sistema de indemnizaciones por
años de servicio y otros que destacan la extensión de los beneficios a mayor
cantidad de trabajadores.
Según Silva existen trabajos que demuestran que el fondo cuenta con
abundancia de recursos, ya que los recursos acumulados superan con creces las
necesidades de entrega de beneficios.
El investigador agregó que cabe preguntarse por qué al constatar la
abundancia de fondos no se elige congelar o eliminar los aportes a este ítem.
"Debemos considerar que la obligación de aportar al fondo solidario encarece la
relación laboral y puede actuar como una barrera a la entrada para los
trabajadores cercanos al salario mínimo, y por el contrario, los fondos se
destinan en un sentido que parece equivocado", aseguró.
Para Silva, la determinación de la entrega de beneficios no debe hacerse
tomando en cuenta la disponibilidad de fondos, sino que el análisis debe
considerar que el objetivo del fondo de cesantía es estabilizar ingresos en un
evento de desempleo inesperado, sin alimentar en exceso el comportamiento
oportunista.
El seguro establece el traspaso de recursos del fondo solidario para
financiar exclusivamente a través del SENCE, la capacitación de trabajadores con
problemas de empleabilidad. "Pero la acumulación de estos fondos no ha sido
gratis, ellos son fruto de aportes de trabajadores y empleadores que por ley
depositan mes a mes parte de la remuneración en este fondo y de la
correspondiente contribución de recursos del Estado que debieran tener un
importante uso alternativo", argumenta Silva.
El investigador agregó que si el proyecto pretende incorporar modificaciones
que amplíen el campo de acción del seguro de desempleo y permitan que los
desempleados encuentren con mayor facilidad un trabajo, "es entonces la
oportunidad de hacer cambios sustantivos en el sistema de capacitaciones, para
que la capacitación tenga como objetivo y resultado aumentar la
empleabilidad".
Esto, a raíz de que algunos programas de capacitación del SENCE han sido
evaluados de manera insatisfactoria y de acuerdo a la CASEN 2006 sólo un 7 por
ciento de los capacitados vía SENCE proviene del primer quintil.