El secretario general de
la ONU,
Ban Ki-moon, pidió hoy una reforma "ambiciosa" de la arquitectura
financiera internacional que conduzca a una mayor representación de
los países pobres en las instituciones multilaterales y favorezca el
desarrollo sostenible.
"Celebro las reformas puestas en marcha
por las instituciones de
Bretton Woods (Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional) para
garantizar su legitimidad y eficacia. Estas reformas deben ser
ambiciosas y sin demoras", dijo Ban en una reunión de la Asamblea
General de Naciones Unidas sobre la financiación al desarrollo.
El
máximo responsable del organismo internacional señaló que los
cambios deben "aumentar considerablemente la voz y la participación
de los países en desarrollo".
Asimismo, resaltó que las
inversiones en estas economías deben
tener como meta el desarrollo sostenible, que pasa por alcanzar en
2015 los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
En ese
sentido, expresó su respaldo a las iniciativas puestas en
marcha por el Fondo Monetario Internacional (FMI) para mejorar las
condiciones de sus préstamos, así como el interés de los líderes del
grupo del G-20 en que aumente la capacidad de la institución
multilateral para conceder crédito.
"Las instituciones
internacionales desempeñan un papel crucial.
El acceso a mecanismos financieros puede aliviar los ajustes
económicos dolorosos", agregó.
A su vez, Ban insistió en que las
economías más ricas mantengan
sus compromisos en materia de financiamiento del desarrollo, para que
"su recuperación no se convierta en una carga para otros".
"Al
mismo tiempo, en muchos países en desarrollo se necesita una
mayor asistencia para estimular sus economías y aumentar las
protecciones sociales a los más afectados", sostuvo.