Intensos meses de trabajo se vienen por delante tanto para la Superintendencia de Pensiones y otras entidades estatales, como para las AFP de cara a la implementación de la reforma de pensiones.
En ese marco, las administradoras siguen de cerca el proceso de puesta en marcha. A través de su primera carta anual a los accionistas en la memoria de AFP Cuprum 2024, la presidenta de la firma, Daniela Zecchetto, señaló que la aprobación de la reforma previsional “marca un antes y un después, con nuevos desafíos para todos quienes participamos en esta industria”.
De cara a la transformación que implicará la iniciativa, manifestó que “asumimos este cambio con responsabilidad y visión de largo plazo”.
“Esperamos poder contribuir con nuestra experiencia y conocimiento para que la implementación de esta nueva regulación sea lo más sostenible posible”. Juan Carlos Chomalí, presidente AFP Capital
Quien también se refirió a la reforma, a través de la carta a los accionistas de AFP Capital, fue el presidente de la administradora, Juan Carlos Chomalí.
El alto ejecutivo de la industria aseguró que Chile necesitaba una reforma que permitiera contar con herramientas que impacten de forma positiva en el aumento de los ahorros previsionales, potenciando la rentabilidad de los fondos y logrando mejores retornos.
En esa línea, destacó el alza de la tasa de cotización a las cuentas individuales, la incorporación del empleador en el ahorro directo para la pensión, la ratificación de que el sistema sea administrado por las AFP, los fondos generacionales y la compensación entre hombres y mujeres.
“Su éxito (del tránsito desde los actuales multifondos a los nuevos fondos generacionales) dependerá del diseño que establezca el regulador”. Daniela Zecchetto, presidenta AFP Cuprum
Por su parte, durante la cuenta pública 2024 de AFP Habitat, el gerente general de la administradora, Alejandro Bezanilla, valoró que la ley tiene como “gran virtud aumentar la tasa de cotización previsional”.
Agregó que el aumento destinado a las cuentas individuales, “era muy necesario”, ya que el porcentaje de la cotización no se había actualizado desde la creación del sistema.
Críticas al diseño
Durante la tramitación, la industria de AFP criticó varios de los focos de la reforma. Uno de los que concentró los mayores cuestionamientos fue la licitación del stock de afiliados que se realizará cada dos años.
Al respecto, Chomalí señaló que “atenta contra la libertad de elegir de las personas, no aumenta la rentabilidad y reduce el número de activos alternativos en los portafolios”, y agregó que provocará que el retorno esperado sea menor.
“Nuestros afiliados deberán estar atentos a los criterios de selección y plazos para ejercer sus derechos de retracto si no quieren ser considerados (en la licitación)”. Alejandro Bezanilla, gerente general AFP Habitat
Bezanilla, en tanto, envió un mensaje a sus afiliados: “Deberán estar atentos a los criterios de selección y plazos para poder ejercer sus derechos de retracto si no quieren ser considerados en dichas licitaciones”.
Además, criticó que “la reforma no tuvo en cuenta la voz de muchos expertos que, al igual que nosotros, pensamos que la totalidad del aumento de cotización debió haber ido a la cuenta de ahorro individual de los trabajadores y que los beneficios sociales no deben ser financiados con préstamos de los mismos afiliados”.
Para el CEO de Habitat, la iniciativa “tampoco tuvo en cuenta los argumentos que rechazan los cambios en la estructura del sistema que restringen la libertad, que asignan al Estado un rol desmedido y que implican riesgos para nuestros afiliados”.
Asimismo, Chomalí criticó que la reforma “carece de mecanismos que mejoren la rentabilidad de los fondos, no se aprecian elementos que incentiven el ahorro voluntario, no se fomenta la formalidad laboral, no ayuda a que se desarrolle el trabajo formal”. Además cuestionó que “en parte, su financiamiento (de la reforma) es costeado por un porcentaje de las cotizaciones de cada trabajador del país”.
Cambios profundos
“Hoy, con la reforma ya aprobada, estamos enfocados en una implementación rigurosa que resguarde los intereses de nuestros afiliados y fortalezca el sistema”, dijo Zecchetto.
La presidenta de Cuprum reconoció que “sabemos que esta reforma traerá cambios profundos en nuestro modelo operativo”.
Por los plazos que establece, aún resta un largo camino para la puesta en marcha, mientras las entidades técnicas tendrán que emitir una serie de normativas y reglamentos para dar forma a la ley. “En este contexto, y como siempre lo hemos hecho, esperamos poder contribuir con nuestra experiencia y conocimiento para que la implementación de esta nueva regulación sea lo más sostenible posible”, expresó Chomalí.
De igual manera, Bezanilla explicó que en AFP Habitat “nos aseguraremos de que cada cambio se implemente de manera rigurosa y con la eficiencia que nos ha caracterizado, manteniéndolo oportunamente informado”.
Uno de los cambios estructurales es el tránsito desde multifondos a fondos generacionales, que está previsto para abril de 2027, según los plazos de la ley.
Zecchetto aseguró que este tipo de modelo de inversión podría traducirse en mejores retornos y, por ende, en mejores pensiones, aunque advirtió que “su éxito dependerá del diseño que establezca el regulador”. Para ello, dijo, será “fundamental contar con lineamientos claros, oportunos y técnicamente sólidos para que esta transición cumpla con su promesa”.