"Grecia no ha pedido un rescate" y "no hay actualmente
necesidad" de rescate, aseguró el ministro griego de Economía, George
Papaconstantinou quien además destacó que sus objetivos de reducción de déficit
van incluso mejor de lo esperado.
Los 16 socios de la eurozona dieron ayer un mes de plazo a Grecia para que
presente los primeros resultados de su plan de saneamiento de las cuentas
públicas, bajo la amenaza de la imposición de medidas adicionales que tendrá que
"aceptar".
Las medidas impulsadas desde Bruselas son recibidas, en Grecia, con sonoras
protestas, y está dando lugar, paradójicamente, a un sentimiento antieuropeo en
la república helena.
Antes esta presión 'local', el Gobierno griego mantiene un tono tranquilizador
en sus mensajes. El ministro de Economía ha comentado que no están preparando
"medidas específicas adicionales" para ajustar sus cuentas públicas.
Los mercados, de momento, también endurecen su postura. La prima de riesgo de
Grecia se amplía por encima de la barrera de los 300 puntos básicos, y los
seguros contra el riesgo de impago (CDS) suben esta mañana 15 puntos básicos,
hasta los 370 puntos básicos.