La presidenta de Argentina, Cristina
Fernández, firmó su primer decreto de necesidad y urgencia desde que
accedió al poder en diciembre último para ampliar el presupuesto de
este año en 36.000 millones de pesos (US$11.575 millones).
La medida se publicó hoy en el Boletín Oficial del Estado.
La mandataria fundamenta su decisión en que es "imprescindible
incrementar los créditos para atender el normal funcionamiento de
las distintas jurisdicciones y entidades de la administración
pública nacional, así como los programas de inversiones,
transferencias y servicios de la deuda pública".
Si bien en el decreto no se especifican los montos destinados a
las diferentes áreas del Estado, la prensa local señala que se
otorgaron 10.000 millones de pesos (US$3.215 millones) a la
Administración Nacional de Seguridad Social para hacer frente a los
aumentos en las jubilaciones y pensiones fijados para este año.
Según el diario La Nación, el 25% del total de la
ampliación del Presupuesto 2008, equivalente a 9.000 millones de
pesos (US$2.893 millones), irá al ministerio de
Planificación.
El decreto también prevé fondos para afrontar el pago de la deuda
con el Club de París, anunciado por Fernández a comienzos de este
mes y que, según el Gobierno argentino, es de unos US$6.700 millones.
Sin embargo, al anunciar el lunes el envío al Parlamento del
proyecto de ley de Presupuesto para 2009, el Ejecutivo señaló que
esa iniciativa prevé "todas las herramientas para garantizar" el
pago de la deuda con el Club de París.
Fernández, que en sus tiempos de legisladora fue una acérrima
opositora al dictado de decretos de necesidad y urgencia, se jactó
hace un mes y medio de no haber recurrido a una medida que había
sido muy utilizada en los últimos años.
De hecho, el esposo y antecesor de la jefa de Estado, Néstor
Kirchner (2003-2007), dictó 270 decretos de necesidad y urgencia
durante su gestión.