EEUU está sufriendo la peor sequía en los últimos 50 años y la baja en las proyecciones de su cosecha de granos comienza a afectar su liderazgo en la exportación de estos productos. El último informe del Departamento de Agricultura de EEUU, sostiene que por primera vez este país dejará de ser el principal exportador de soya, al recortar en 10 millones de toneladas el cálculo inicial de la cosecha. Sin embargo, el cultivo más afectado en EEUU es el maíz, donde se pronostica una reducción de 100 millones de toneladas en la cosecha.
La sequía también afectó a Rusia, que sufrió daños en su agricultura contabilizados en US$ 1.200 millones, según el Ministerio de Agricultura. Mientras que India, teme porque el nivel de lluvias de monzón está bajo el promedio.
Quienes también pierden, son los principales importadores de alimento, que deben enfrentar la continua alza en el precio provocada por la reducción de la oferta y al mismo tiempo, un alza en el costo de la importación por la fortaleza que tiene el dólar en la actualidad. Los países importadores del Caribe y Centroamérica, se verán especialmente afectados debido a que obtienen sus cereales principalmente de EEUU, pero también países como Egipto, Corea del Sur, Indonesia y Marruecos, podrían sufrir la potencial crisis de alimentos.
Se dice que el grano es el producto con mejor desempeño del año y que la tendencia al alza de sus precios continuará. Los ganadores frente a esta crisis, son los países exportadores que no han visto comprometidas sus cosechas por el clima e incluso han aumentado su producción. Aquí está Argentina, que aumentó un 34% su producción de soya y logró instalarse como el tercer exportador mundial; Brasil, que pasa a ser el principal exportador de soya al desplazar a EEUU; Ucrania, que aumentó un 31% su exportación de granos este mes; Canadá, que proyecta un aumento en la producción de trigo de 25,261 millones de toneladas métricas a 26,7; y Paraguay, que podría ganar nuevos clientes frente a la menor oferta mundial.
