Un pilar de reparto con solidaridad intrageneracional e intergeneracional, financiado con el 5% de la cotización con cargo al empleador, será una de las principales demandas que instalará el Partido Socialista (PS) en el debate previsional. Qué porcentaje del nuevo aporte patronal se destinará a las actuales pensiones y qué monto a las futuras es un tema aún por resolver. Para eso, la colectividad cuenta con un equipo de asesores, en donde se destacan el ex ministro de Hacienda, Alberto Arenas; el consejero del Banco Central, Mario Marcel; el ex superintendente de Pensiones, Álvaro Gallegos; y los ex integrantes de la comisión Bravo, Andras Uthoff y Regina Clark, entre otros. El equipo es coordinado por el senador Juan Pablo Letelier, quien será la voz del partido en el trabajo prelegislativo.
Para el parlamentario, no sólo es clave asegurar que el 5% sea destinado íntegramente a un pilar de reparto, también avanzar hacia un sistema único de pensiones y cambios paramétricos. Letelier cree, eso sí, que concretar la reforma previsional con “un gran acuerdo nacional” es una tarea casi imposible.
- ¿Qué le parece la propuesta del gobierno, que valida el sistema actual, aunque sugiere corregirlo?
- En la pregunta hay una afirmación que no comparto, porque es parte de la discusión que la sociedad chilena tiene que hacer. La Presidenta nos ha invitado a avanzar hacia un cambio de paradigma. En nuestro país, a nivel constitucional, la seguridad social no es un derecho y tampoco la previsión social, y la Presidenta ha planteado un cambio de modelo y ha dicho: abandonar un modelo de capitalización individual, que es lo existente, a un modelo de previsión mixto. En estas discusiones, que son algo políticas e ideológicas, algunos deseamos un cambio más radical, otros querrán preservar rasgos. Lo que ha hecho la Presidenta es poner los elementos mínimos para una discusión, que corresponde promover al mundo parlamentario, partidario y a la sociedad. Es una tremenda oportunidad para el país.
- Pero el gobierno no ha planteado abandonar el modelo de capitalización individual.
- Ella ha hablado de cuentas individuales, para ser rigurosos en los conceptos. En los sistemas de reparto uno también aporta. Hay otro elemento que, a mi juicio, es el sustantivo, que es quién administra los aportes, y eso es propio de un acuerdo político. En las movilizaciones de ‘No más AFP’, nadie dice que no se hagan aportes individuales; lo que hay detrás de esa movilización es quién administra los US$ 171.000 millones que existen en el sistema y cómo se garantizan las pensiones.
- ¿Es posible un acuerdo nacional?
- Construir un pacto nacional será muy difícil porque los intereses creados son gigantes y no por las pensiones. Quienes más van a defender el modelo, bajo el discurso del ahorro individual, son quienes ganan más plata y quienes no viven ni van a vivir de sus pensiones; personas que están más preocupadas de quién controla el mercado de capitales y para qué se usan esos recursos. Ahí es donde vamos a encontrar la verdadera resistencia.
- ¿Qué está pensando el PS para el 5% con cargo al empleador?
- En principio somos partidarios que esos recursos vayan a un modelo solidario, intrageneracional e intergeneracional, porque queremos mejorar las pensiones de quienes hoy están jubilados, como también las futuras. Adicionalmente hay otras medidas de corto plazo que creemos se pueden tomar, que dicen relación con las definiciones paramétricas, como las expectativas de vida y el cálculo de las pensiones. Plantear que alguien vivirá 110 años y calcular la pensión con esa proyección no es correcto. Nos parece atractivo hablar de la tercera y cuarta edad, y generar mecanismos de seguros para las personas más longevas.
- ¿Qué otras medidas están analizando?
- Vincular la comisión que cobran las AFP a la rentabilidad de los fondos es un tema de principios. Otro tema es cómo avanzamos hacia un modelo de pensiones universal.